El amor entre ellos dos surgió de repente, podrían ser la pareja más feliz del mundo, pero el destino es totalmente distinto porque su amor es prohibido...
Kagome está casada con InuYasha por compromiso, pero está enamorada de Sesshomaru su medio he...
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"LOS CARTELES DE AYUMI Y EL MIEDO DE RIN"
Rin se interpuso delante del cuerpo de Kagome extendiendo los brazos.
—¡Alejate de nosotras!— experto temblandóle la mandíbula.
Sesshomaru caminaba a paso lento —¡Rin, soy yo... Sesshomaru!— intentaba calmarla. —Sé que lo que presenciaste era algo aterrador, pero es mi bestia interna...
—¡No te acerques!.
—Es Yako...
Rin no quería escuchar, seguía gritando pero Sesshomaru estaba cerca. Se inclinó a ella mientras cerraba los ojos, no quería verlo. —Rin, ¡Mírame y abre los ojos!—exigía. Kagome intentaba despertar, los gritos de la niña la habían vuelto a su realidad, sin embargo quería ver o al menos escuchar las posibles respuestas que daría Sesshomaru a la niña o si tan sólo dijera algo "comprometedor" que la saque de muchas dudas.
—¡Vete por favor!—implora la niña.
—Esta bien... Me iré, no antes sin decirte algo— da una pequeña pausa en su conversación para que la niña lo asimile y continua severamente. —Yo jamás le haría daño a ti o a Kagome, porque me importan demasiado.
Rin se ha sorprendido. —¿De verdad?.
—¡Si!— afirma resignado.
Una risita sonsa sale de la boca de Rin con una expresión de ternura en el rostro, haciendo reflejar su sonrisa chimuela.
—No es verdad...
Sesshomaru arquea las cejas. —¿Por qué lo dices?.
Rin mueve la cabeza. —¿Por qué los adultos son tan tontos?. Tú me aprecias a mí, pero... Mira de manera curiosa al peliplata.
Rin suelta la frase con alegría y a gritos a todo pulmón. —¡Tú amas a mi hermana Kagome!.
Él se ha quedado petrificado... —Rin no digas tonterías!. Una niña pequeña había descubierto la posible debilidad del gran Sesshomaru y eso le incomodaba absolutamente aunque su rostro se haya reflejado un ligero rubor cereza no lo aceptaría. En cambio a Kagome un remolino de sentimientos atacaron sus entrañas, detestaba que Sesshomaru fuese tan místico pero a la vez le atraía todo ese misterio aún más, deseaba reclamarle pero aún había posibilidad de escuchar algo, intentaría hacerse la desmayada por más tiempo.
