Good is the New Black

Danny!

A Sia le agradaban la mayoría de los amigos de Lucifer — aunque según su Papá eran tan solo conocidos, pero ella sabía mejor — pero en definitiva uno de sus favoritos por lejos era Danny.

Danny fue uno de los primeros en hacerla sentirse aceptada luego de que salió de la liga. Para ser honestos Sia de niña  no conociendo nada mejor pensó que ella era la extraña.

Tanto su abuelo, como Maze y Lucifer compartían cierto gusto por la violencia hasta cierto grado, y Sia aunque podía ver la ventaja de saber defensa personal, nunca estuvo cómoda cuando la violencia se usaba para dañar a otros con la sola intención de provocar dolor o sufrimiento, pero luego conoció a Danny y este le hizo ver que todas las personas eran diferentes, y eso no era algo malo, era algo que debía ser celebrado.

Las diferencias nos hacían especiales, únicos e irremplazables, pero eso no debía hacer que olvidaramos que nuestras similitudes también nos unían a otros.

Asi que considerando todo lo que estaba pasando ahora mismo en su vida Sia estaba feliz de poder ver a su amigo de nuevo incluso en este tipo de circunstancias.

— ¿Estás segura de que este es el lugar? — Preguntó Tim bajándose del auto mirando la calle que parecía abandonada para nada como el alegre lugar que Sia describió.

— Oh Danny, ¿Que te paso? — Murmuró Sia insegura viendo el nombre de la calle en el letrero solo por si acaso, jamás habiendo a su amigo de esta forma antes.

Sia miro una vitrina donde comenzaban a aparecer unas letras de color rojo.

"Lamento no poder recibirte bien"

Decían las letras y tanto Damián cómo Tim vieron algo sorprendidos la vitrina.

— ¿Quién está haciendo eso? — Quiso saber Damián ahora con algo de desconfianza.

— Danny.

— ¿Tu amigo es un hechicero? — Interrogó curioso Tim.

— No, este. — señaló todo el lugar, la calle entera. — Es Danny.

— La calle. — Murmuró Tim ligeramente asombrado. — La calle entera es Danny eso.. wow, tengo tantas preguntas. — susurro con sus ojos brillando con curiosidad.

— ¿Donde esta Maura? — Preguntó Sia y algunas flechas aparecieron en letreros y ventanas guiando los hasta el único lugar que parecía abierto y vivo.

Era un club donde dentro habían varias personas vestidas de forma colorida y alegre pero que sus expresiones dejaba ver qué no estaban de ánimo para celebrar.

— ¡Maura! — Exclamó Sia feliz al ver a su amiga en el escenario.

— Oh Sia, querida. — Sonrió la mujer de color bajándose del escenario donde estaba cantando para poder tomar a la chica en brazos levantándola del suelo en un gran abrazo.

— Te extrañe tanto. — Murmuró Sia devolviendo el abrazo.

— Yo también mariposa. — respondió dejándola en el suelo. — ¿Y? ¿No me vas a presentar a tus lindos amigos?

— ¡Por supuesto! — Dijo señalando a los chicos. — Damián, Tim, ella es la mujer más fabulosa que encontrarán Maura Lee Karupt, ella me enseñó a maquillarme. — Señaló a la mujer con orgullo. — Maura, ellos son mis... — Dudó un segundo al no saber que terminó usar exactamente. — mi Damián y mi Tim. — Termino al no poder decidir un título.

— Un gusto Damián y Tim de Sia. — Río la mujer estrechando sus manos.

— El gusto es mío. — Respondió Tim y Damián solo asintió con la cabeza.