Good is the New Black

Al final todos caen, es un hecho

Si tenía que ser honestos Bruce aún no tenía un plan de acción para ayudar a Sia a ser mejor persona pero ya que ella no parecía estar apurada y tampoco hacía ademán de apurarlo se dejó estar un poco, de todas formas a Damián parecía irle mejor con Sia una vez decidió que tal vez darle el beneficio de la duda no sería el fin del mundo.

Desde entonces Sia parecía revolotear cerca de Damián siguiéndole por todas partes como un pato bebé siguiendo a su Mamá y Bruce creía a que se debía a que Sia era una persona social por naturaleza y no estaba acostumbrada a la soledad de vivir en una mansión con pocos ocupantes. Damián por su parte a veces parecía querer asesinar a Sia, pero al final de todas formas siempre terminaba cediendo y escuchando cada una de sus historias — Y Bruce está seguro que también lo vio contrabandear algunos de los libros de la biblioteca para Sia — era adorable en una extraña forma, como si fueran hermanos desde el principio y hubieran sido criados como tal.

Quizás esto también sería bueno para Damián al final y le ayudaría a bajar algunas de las paredes que aún seguían alrededor desde su tiempo en la liga y que nunca fueron derribadas del todo.

— Alfred ¿Donde estan Damián y Sia? — Preguntó luego de no verlos en su lugar usual en uno de los estudios que Damián usaba como oficina la mayoría del tiempo.

— El... — Pareció dudar ante la palabra para usar lo que era impropio de Alfred y Bruce le vio con curiosidad. — El señor Morningstar se contacto esta mañana con la señorita Sia. — Informo y ah, eso explicaba la duda en el término, Sia seguía llamando al diablo su Papá aunque ahora de vez en cuando se refería a Bruce como su Padre. — Al parecer una amiga mutua fallecío ayer en la noche, por lo que la señorita estaba bastante molesta y el amo Damián la llevo por un helado para animarla.

— Oh eso... Entiendo. — Murmuró tragando saliva sin saber muy bien como reaccionar ¿Se suponía que debía dar su pésame y ofrecer consuelo? Pero Damián ya estaba haciendo eso... Quizás debería mirar el caso del amigo en común y ver si podía ofrecer algún tipo de ayuda o compensación a la familia. — Espera, ¿Dijiste que fueron por helado? — Hizo una mueca porque eso era algo demasiado normal para ser una sugerencia de Damián.

— Eso fue lo que dijo el amo Damián. — Respondió Alfred y Bruce aun no se sentía del todo confiado al respecto pero asumía que podía poner algo de confianza en sus hijos, por hoy al menos.

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— Pensé que íbamos por un helado. — Murmuró Sia viendo cómo estaban entrando a la carretera.

— Tenía que decirte eso o le dirías a Pennyworth la verdad. — Contestó Damián atento a los vehículos que pasaban a su lado por que eso era lo que un buen conductor debía hacer.

— ¿Y a donde vamos? — Preguntó ligeramente curiosa.

— Vamos a Los Ángeles para poder encontrar a los culpables del asesinato de tu amiga y que rec—

— Quiero bajarme. — Le corto para sorpresa de Damián quien parpadeo no esperando eso.

Hasta ahora había descubierto que él y su hermana compartían morales parecidas — lo cual no sabía que pensar al respecto ya que eran las del diablo también —, Sia estaba en contra de tomar vidas, ¿Pero todo a parte de eso? Era en su mayoría juego justo, y en especial compartía la creencia que aquellos que hacían algo terrible merecían ser castigados. Razón por la que pensó que estaría totalmente abordo con la idea de hacer justicia por su amiga la cantante.

— ¿Porque quieres hacer eso? — Cuestionó comenzando a ir ligeramente más despacio.

— Porque no puedo ir a casa, no aún al menos. — Contesto pareciendo aún más decaída que cuando le dijo sobre la muerte de su amiga por lo que Damián tomo una larga respiración y decidió que su viaje tendría que terminar antes de poder empezar.