A las lejanías de Masachusset, en un pueblo llamado Concordia, existía una familia conformada por cinco hermanas: Anne, Meg, Jo, Amy & Beth, además de un hermano por elección, su vecino, Theodore "Laurie" Laurence, quien como un gesto de agradecimie...
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No existe la más mínima duda de que la boda de Anthony Bridgerton y Anne March será considerada el evento más importante de toda la temporada, sustituyendo incluso a la unión del diamante de temporada y a su duque.
Y es que Londres incluyendo a esta autora está atolondrada, por ver un amor tan puro como el de ambos unirse en la sagrada institución del matrimonio.
REVISTA DE SOCIEDAD DE LADY WHISTLEDOWN
Anthony comprendía la situación de Anne, sabia que su madre podría llegar a convertirse en un problema por tanta efusividad, querían casarse por supuesto, pero no estaban preparados para tratar con dos madres que desde siempre habían planeado la boda de sus primogénitos.
Asimismo, estaba consciente de que solo bastaba que pusiera un pie en la Residencia Laurence para volver a enfrentarse a otra ronda de preguntas sobre decoraciones y otras cosas.
El compromiso se oficializo hace dos días y ya se extrañaban, con suerte mantenían una conversación de pocos minutos antes de que se volvieran a centrar en la boda, necesitaba a Anne.
¿Era tan difícil querer pasar un tiempo a solas con ella?
Al parecer si, pues básicamente tuvo que cometer secuestro.
-¿Así que esta es su definición de casa?- pregunto Anne al ingresar a la residencia de soltero de Anthony Bridgerton, sorpresivamente resultaba acogedor. Papel tapiz de color azul adornaban las paredes junto algunas pinturas familiares pequeñas, tres sillones de cuero color café daban el toque varonil, postrados alrededor de una mesa de cristal frente a una chimenea
-Mi casa es donde usted este presente- le encantaba mirarla, sus ojos brillaban de curiosidad mientras se paseaba por toda la habitación queriendo memorizar hasta el más mínimo detalle
-¿Y el servicio?- pregunto Anne mientras apreciaba la vitrina de vinos del vizconde, recordando que nadie había reparado en abrirles la puerta o darles la bienvenida
Su cuerpo brinco de un escalofrió causado por Anthony Bridgerton, pues, al verla tan entretenida se acercó a ella estratégicamente sorprendiéndola, nuevamente acorralándola con su cuerpo y un mueble.
