Chico enigma

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— te amo ¿sabes? — soltó Mateo dandole un beso tierno mientras la tapaba con la fina sabana ya que ambos se encontraban desnudos

— yo tambien te amo — sonrió ella que se sentía muchisimo más aliviada despues de haberle dicho todo lo que le tenía que decir mientras lo miraba a los ojos y acariciaba su cara despacio

Se quedaron un buen rato abrazados, disfrutandose, mirandose y sintiendo esas cosas que siente la gente cuando esta enamorada, cuando tiene a esa persona que ama a su lado.

— no... no... ¿qué hora es? — preguntó Mila alterada saliendo de la cama de un tirón mientras empezaba a buscar su ropa que se encontraba repartida por toda la habitación

— las 16:30 ¿por que? ¿qué pasa? — cuestionó él sentandose sin entender nada

— mi vieja acaba de entrar ¿no escuchaste el ruido de las llaves? sino te cambias en medio minuto capaz sea la última vez que me veas porque voy a morir... — respondió hablando a la velocidad de la luz en un tono de voz bajo para que su mamá no la escuchara

Mateo se levanto de la cama de la misma manera y empezo a ponerse la ropa a las apuradas. Lo que le faltaba era conocer a su casi suegra de esa manera...

— quedate como en la puerta... anda... dale... quedate parado ahí... — lo empujó Mila

— ¿eh? ¿para...

— hola mami... — sonrió Mila tratando de disimular toda la escena

— hola hija... hola...

— Mateo... mi compañero de colegio... vinimos a buscar un libro de quimica... tenemos que hacer un trabajo... esta... mmm... — habló haciendose la que bucaba algo — acá está... este libro necesitaba...

— hola, buenas... ¿todo bien? — sonrío Mateo dandose vuelta con los pelos de punta para saludar a la señora

— hola querido... bien... todo bien... ¿me queres dejar un segundo a solas con Mila? — le devolvió la sonrisa la mujer mirandolo a los ojos

Mateo asintió saliendo de la habitación y cerrando la puerta.

— ¿que pasa ma? — preguntó Mila acomodando su pelo y sus anillos como cada vez que se ponía nerviosa

— chicos en tu pieza no... las reglas son claras... — soltó la mujer mirandola seria

— daaa ma... vinimos a buscar el libro... ya bajabamos a terminar el trabajo practico... no seas gede...

— ¿gede? — cuestiono ella

— no seas densa... ya tengo casi 18 años... si quisiera traer a un pibe...

— Camila... — la interrumpio ella

— ¿que mamá? — suspiró la castaña cansada de que la tuvieran en una cajita de cristal

— primero no me faltes el respeto que yo amiga tuya no soy... y segundo, mientras vivas en esta casa se hace lo que yo digo... — respondió la mujer mirandola a los ojos

— pero...

— sin peros... si te digo estas cosas es porque te quiero cuidar, porque ya pase esa etapa... asi terminó mi amorío de los 18...

Los papás de Mila se habían casado de muy jovenes y luego las cosas no habían terminado del todo bien...

— ¿algún día dejaras de reflejar tus miedos en mi? que te haya pasado a vos no quiere decir que me vaya a pasar a mi... — bufó enojada, no entendía porque no la dejaba mandarse sus propias cagadas, porque no la dejaba vivir su propia vida

— ¿me estas diciendo entonces que estas con ese pibe? Mila por favor decime que esto es una broma... — negó entre espantada y alterada

— no... mamá no estoy con él... es un amigo... un compañero del colegio... pero y si quisiera estar con él ¿qué?

— que ni se te ocurra... ese es el que repitió ¿o no? me dijeron que fuma y anda en cualquiera...

— repitió en primaria mamá por dios... vos tambien fumabas que te haces ahora... — le retrucó ella sin poder creer que en pleno siglo XXI existieran personas tan prejuiciosas

— Camila, haces ese trabajo práctico y después al chico ese no lo ves mas... no lo traes mas a casa ¿me escuchaste? — soltó la mujer indignada

— dios... no puedo creer que seas así... si ni lo conoces... no tenes ni puta idea de quien es, ni que hace, ni de nada... — respondió Mila ya sacada por todos estos planteos

— no digas malas palabras Camila...

— Mama por dios... que tengo casi 18 años, en un mes de mierda voy a ser mayor de edad, deja de tratarme como un bebe porque ya pase esa etapa hace mucho tiempo

— bueno te repito, cuando te mantengas sola y puedas hacer uso de tus 18 años haces lo que quieras, te manejas como mas te guste. De momento estas bajo mi tutela, mi techo y mi plata, asi que no te queda otra

— no te banco mas... — soltó la castaña casi en un grito dejando la habitación de un portazo y buscando a Mateo para irse de su casa por lo menos unas horas porque la realidad es que no soportaba ni una palabra mas de su vieja.

mateo atrás de la puerta tipo: quE maL hiCe ShO ahOra 😫😫

en fin denme bola que voy a tratar de subir un par más si es que me da la cabeza jeje