Capítulo VII - Viejos conocidos II (Parte II)

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Capítulo VII – Viejos conocidos II (Parte II)

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Sakura sonrió dulcemente cuando vió a Kero profundamente dormido en su diminuta camita y bajo la luz de la luna, que se filtraba débilmente por la ventana de su habitación.

La luna. Tan brillante y hermosa como de costumbre. Tan serena e inalcanzable.. por un instante casi podía sentirse acompañada y protegida.

Yue.

En su mente empezó a formarse una imagen plateada y alada cuando repentinamente tropezó y salió bruscamente de su ensoñación al sentir un leve dolor en la rodilla. Bien merecido se lo tenía… Shaoran le había dicho en Hong Kong que probablemente, cuando Kerberos fue sellado en el libro hace años, Yue también debió haber permanecido de la misma manera en el interior de Yukito y sólo podría liberar ese sello cuando encontrara a Yukito o pudiera usar completamente sus cartas.

Pero no pensaba romper ese sello. Eso era cosa decidida.                     

Probablemente Yukito tenía ahora una vida normal y feliz, lo más seguro era que la hubiera olvidado y no era justo despertar a Yue –y posiblemente colocar a Yukito en una situación difícil- sólo porque se sentía algo preocupada por los sucesos de Hong Kong. Ahora estaba en casa y aquellos problemas entre hechiceros habían quedado con los hechiceros, en China, con Shaoran y su familia. Ella había vuelto al mundo normal –con poderes mágicos, pero no en medio de una guerra de hechiceros- y tenía que aplicarse no solo en los estudios, el trabajo y cuidar bien de su padre –aunque él parecía cuidarla más a ella- ahora tenía que desarrollar su magia.

Porque una cosa si estaba clara para ella.

Las palabras que pronunció Shaoran la tarde en que se volvieron a ver después que Kero había explicado que su "Maestra de Cartas" había olvidado sus poderes por propia voluntad…

- "Aquellos que hemos sido favorecidos con poderes mágicos no podemos darnos el lujo de comportarnos de esa forma" –había dicho sin perder la calma ante los ataques de Kero- "tenemos una responsabilidad hacia los demás y si todos renunciáramos o culpáramos a la magia de nuestros problemas, algunos hechiceros sin escrúpulos podrían hacer mucho daño"

No podía ser egoísta. A partir de mañana iba a usar sus cartas para encontrar a sus amigos y a su hermano, para asegurarse de que estuvieran bien. Si no lo estaban, entonces usaría su magia para ayudarles. Nunca haría nada que les hiciera daño o perjudicara en modo alguno.

Pero la verdad era que estaba muy cansada. Bueno, en realidad cansada no era la palabra adecuada para expresar como se sentía. Había estado muy ocupada en ordenar sus horarios desde que supo que su padre ya había tomado las medidas necesarias para su inscripción -¡su dulce y amado papá, tan bueno como siempre!- y apenas acababa de convencer a la dueña del cafetín donde trabajaba para la súbita modificación de su horario de trabajo… pero se había enojado de tal forma que lo más seguro era que empezara a buscar otro empleo.

Suspiró de nuevo mientras se acostaba. ¿Porqué se estaría sintiendo tan triste?… si estaba en casa y no en Hong Kong, donde lo sobrenatural parecía ser parte de la rutina; estaba en su hogar y no en la peculiar mansión de Shaoran… rodeada por su no menos particular familia… estaba en su casa…. y Shaoran se había quedado en Hong Kong y posiblemente no volvería a verlo jamás.

Suspiró por última vez antes de mover las cortinas de su ventana.

No vería a Shaoran nunca más.

Sakura Card Captor - EL ULTIMO CARD CAPTOR (Mikki)Where stories live. Discover now