Epílogo

1.2K 67 11
                                    

 Canción del capítulo en vínculo externo ♧ 

♧ Canción de Brooke en multimedia ♧ 

Estaba sentada en el jardín trasero de Dartmouth. Me habían ofrecido una beca gracias a mis buenas calificaciones y por supuesto, había aceptado. ¿Quién rechazaría una beca aquí? Ni siquiera un loco. Las clases hoy se habían suspendido por ser la final entre los Big Green contra los Tigers de Princeton. Ambos equipos pertenecían a la Ivy League. El partido era polémica en prácticamente todo el país. Así que estaba con un anotador y mordiendo el capuchón de la lapicera, pensando. Últimamente se me daba bastante bien esto de componer. Bueno, por lo menos la parte de hacer las letras. No sabía la parte de tocar la guitarra, eso debía tocarle a Niall. Rodé los ojos por mi ocurrencia. Después de varias ideas y algunas cosas tachadas, pasé a limpio la primer parte.

“Apuesto que a esta hora de la noche sigues despierto. apuesto que estás cansado de una larga y dura semana. Apuesto que estás sentado en una silla contra la ventana, mirando la ciudad. Y apuesto que a veces te preguntas por mí.”

Seguí escribiendo.

“Y solamente quiero decirte que doy todo de mí para no llamarte. Y desearía poder ir corriendo hacia ti y espero que sepas que cada vez que no lo hago, casi lo hago. Casi lo hago.”

Una lágrima se me escapó, golpeando contra la hoja. Habían pasado más o menos dos años desde que se había ido. Faltaban apenas unos días para que sea la ceremonia de cierre y me gradúe. Sí, terminé una carrera en dos años. Toda una privilegiada. Aunque en realidad, como no tenía vida social ni dentro ni fuera de Dartmouth, me apuntaba a todas las clases posibles. Y había terminado en dos años. Dejé un espacio en blanco, sabiendo que faltaba algo, y copié la última frase que había escrito nuevamente. 

“Hicimos un gran desastre, cariño. Probablemente sea mejor de esta forma. Y te confieso, cariño. En mis sueños tocas mi cara y me preguntas si quiero volver a intentarlo contigo. Y casi acepto.”

Y otra vez lo que sería el estribillo.

“Apuesto que a esta hora de la noche sigues despierto. apuesto que estás cansado de una larga y dura semana. Apuesto que estás sentado en una silla contra la ventana, mirando la ciudad. Y espero que a veces te preguntes por mí.”

No me había contactado con Niall desde Año Nuevo. Era duro tratar de seguir una amistad cuando claramente seguía amándolo. Así que por Año Nuevo me propuse olvidarlo. Claramente, dos años después, no lo conseguí. Parece que Niall se había propuesto lo mismo, porque el tampoco me había mandado un mísero mensaje. Mi vida había cambiado bastante. Ahora vivía en la universidad, excepto durante las festividades. Para entonces, volvía a mi casa. Pero no me quedaba mucho. Una semana más, y buscaría un trabajo. Mamá había sido contratada en un banco importante, y tenía una buena paga. Nos habíamos mudado, habíamos comprado muebles nuevos... Eso ayudó también a que me becaran. Cuando la veía, también notaba que Emily era mucho más feliz ahora. Y también que crecía demasiado rápido.

El equipo de fútbol pasó corriendo por delante mío, seguido por las animadoras. Todos con cornetas, trompetas, bombos y tirando papelitos. La mayoría de allí también se graduaba. Esto era demasiado triste y emotivo, incluso para mí.

Me levanté cuando me hube cansado de exprimir mi cerebro para rellenar el espacio en blanco, pero no lo lograba. Me limpié mis jeans y me adentré en el edificio, buscando algo interesante por hacer hasta el partido. Después de todo, esta semana iba a ser bastante aburrida para mí, excepto por el sábado. Nada que hacer hasta que me tuviera que arreglar para la entrega de diplomas. No saldría con honores, pero salía más temprano y eso me compensaba todo.

Detrás de las cámaras » n.h «Where stories live. Discover now