TE JURO QUE TE AMÉ

Bogotá-Colombia

POV Daniela

Por fin me encontraba en Bogotá después de un largo viaje. Mi papá fue por mi al aeropuerto, Juliana se encontraba en Miami por negocios.

Tenía sentimientos encontrados por un lado estaba triste por dejar a Santiago en Los Ángeles y por otro lado estaba feliz de ver a mi papá y a mi hermana. No me había dado cuenta lo mucho que los extrañaba, aunque ya estoy acostumbrada a sus ausencias por sus constantes viajes de negocios nunca habíamos pasado tanto tiempo separados.

También había extrañado a mis amigos la "pandilla". Paula, Kim, Johan, Sebastián, Mario, Juliana Sedan y yo éramos muy unidos, aunque Mario ya no es mi amigo seguimos formando parte del grupo. Obviamente había extrañado a Pau y a Kim más que a nadie.

Ya en casa hablé un rato con mi papá y subí a mi habitación, estaba exhausta y lo único que quería era dormir. Hoy iniciaba las clases pero por razones obvias no iba a ir a la universidad.

Luego de ponerme la pijama tomé mi celular y le escribí a mi novio.

Para Mi Cielo🥰
Hola cielo, te extraño demasiado😔

De Mi Cielo🥰
Hola bebé. Ya me haces mucha falta

Para Mi Cielo🥰
Pensé que dormías 🤔

De Mi Cielo🥰
No puedo, mi cama te extraña.

Para Mi Cielo🥰
Solo tu cama? 😈

De Mi Cielo 🥰

Mi cama, mis manos en tu cuerpo, mis labios en tu piel...

Vídeollamada entrante
Rechazada

Sabía muy bien las intenciones de mi novio con esa vídeollamada y aunque me prendía la idea estaba muy cansada.

De Mi Cielo🥰
Por qué rechazaste la llamada? 😞

Para Mi Cielo🥰
Porque tú y yo sabemos a donde nos iba a llevar esa llamada y por más que me muero de ganas estoy muy cansada. Me perdonas? 😘

De Mi Cielo🥰
Me matas D. Descansa TE AMOOO!!!❤️

Para Mi Cielo🥰
Sueña conmigo. TE QUIEROOO!!!💋

Antes de silenciar mi teléfono y colocarlo sobre la mesa de noche, repasé los dos últimos mensajes de mi conversación con Santiago. Me escribió TE AMO y a diferencia de nuestra despedida en el aeropuerto está vez no pude decirle lo mismo, me limité a un simple TE QUIERO. Por suerte el cansancio hizo que me durmiera de inmediato y me sacó de mis pensamientos.

Estaba durmiendo cuando sentí que alguien dejaba pequeños besos en mi cuello.

-¿Se puede saber qué carajos estás haciendo?- pregunté molesta.

-¿No es obvio? te estoy dando tu dosis de besos mañaneros, así no extrañas tanto a tu novio- dijo Pau con un tono burlón -Eso si nada de sexo, ya sabes que no creo en eso de reforzar la amistad.

-Idiota- dije lanzándole una almohada.

-Espero no haberte excitado- dijo levantando las cejas.

-Ven acá- extendí mis brazos -Te extrañe babosa.

-Yo también jodona- me abrazó fuerte.

Pau es como mi hermana, somos amigas desde que estábamos en pañales. Ella ha sido mi apoyo, mi cómplice, mi terapeuta, mi hombro para llorar. Tiene un humor muy particular. No puedo evitar verla y pensar ¿qué sería de mi vida sin esta loca?

-Bueno basta de sentimentalismo- dijo recostándose en el respaldar de la cama -Saca tu sucio trasero de la cama y ve a ducharte. Vamos a salir a almorzar, tenemos mucho de que hablar, pero primero vamos por Kim a la universidad.

Me apresuré en darme un baño y alistarme, necesitaba hablar con Pau y Kim sobre mis sentimientos hacia Santiago.

A Kim la conocimos hace tres años, cuando su familia decidió mudarse a Bogotá y terminó la secundaria en nuestro instituto. En poco tiempo se ganó el corazón de Pau y el mío. Kim es dulce, hasta se podría decir que un poco inocente, es el polo opuesto de Pau.