Capítulo 4

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Pov, s Eiden.- Unos minutos antes


Nuestros ojos se conectaron, su azul intenso se fundió con el gris verdoso de los míos, era como si el tiempo se detuviera, llevaba una blusa verde de tirantes, jeans blancos, su cabello estaba en un chongo alto y  esos bonitos, gruesos y sensuales labios pintados de rosa, ella también me estaba viendo todo el cuerpo, el carraspeo de el chico pelirrojo nos volvió a la realidad.


-Lo siento -se disculpó con esa sensual voz


Se alejaron, mi vista se quedó en su muy buen culo hasta que ambos se perdieron en el pasillo, entré a la cafetería y me volví el centro de atención, rodeé los ojos, llegué hasta la mesa y me senté, William levantó la vista al igual que Natalie al sentir mi presencia.


-¿Como estuvieron las clases? -preguntó Nat

-Igual que siempre aburridas -respondí

-Bueno, pues tenemos trabajo -reveló Will

-¿De que se trata? -pregunté

-Matthew Yairs, tercer año, necesita mínimo un ocho en matemáticas, quiere que cambiemos sus calificaciones -avisó Will

-¿Que maestro? -me interesé

-Moorein -respondió el chico castaño

-Bien, mándale mensaje a Vanessa y dile que lo haga, que la ayude Liam, no quiero errores como la ultima vez

-De acuerdo -asintió Will sacando su celular 

-¿Que tienes? -preguntó Nat mirándome- y no digas que nada porque se que te pasa algo, estas muy pensativo

-Yo..., ¿que dirían si les digo que quiero incluir a alguien? -los miré


Ambos levantaron la cabeza asustados y sorprendidos.


-Depende, ¿de quien estamos hablando y por que quieres incluirlo? -cuestionó Will

-¡Creí que conmigo bastaba! -Nat hizo un puchero

Reí- solo fue una pregunta equis y tu no estas en eso aún

-¡Oye! -replicó Natalie

-Yo no creo que fue una pregunta equis, ¿quién es? -se interesó Will

-Nadie importante -negué

-Debe serlo si pensaste en incluirlo sin que el se acercara a ti -opinó Natalie

-Solo olvídenlo -murmuré

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Pov,s Kimberly.- Al día siguiente


-¡Señorita Gerrer! -me llamó la maestra por cuarta vez en una sola hora

Abrí los ojos con pesadez- ¿si?

-A el salón no se viene a dormir, no se si sabe que esta es la universidad, no el kínder en donde hay horas de siesta

-Lo siento, es que me dormí tarde por hacer tarea -mentí

-Bien, no se vuelva a dormir -se alejó de mi mesa


La razón por la que me había quedado despierta hasta tarde fue por el maratón de películas que había hecho cuando llegué a casa, hoy casi no alcanzaba a llegar y la verdad es que me estaba cayendo del sueño

Pecado adictivo☑️☑️Where stories live. Discover now