Pecado adictivo☑️☑️

Capítulo 46: Golpe al corazón

Pov, s Kimberly.- Un mes después (Octubre 16)

-¿Quieres pastel? -cuestioné

Kaden negó -¡por favor no!, estoy harto del pastel, lo único que se ha comido en mi casa de postre es pastel y ya no quiero

-Es que le pastel de tío Izan y tu tía Caitlyn si estaba muy grande -recordé- cuatro pisos era exageración

-Yo lo se y papá también pensó lo mismo, pero mi abuela Camille y mi madre fueron las encargadas de todo, a ellas les gusta exagerar todo, el punto es que voy a terminar agarrándole asco al bendito pastel de crema

-Que feo, pero bueno, más para mi -reí

Corté una rebanada de pastel de crema y la serví en mi plato, miré a Kaden el cual estaba muy interesado en su celular, estábamos en casa de mis tíos Alessia y Kenneth, mis padres y tíos estaban en el área de piscina, pero como se me había antojado un pedazo de pastel había obligado a Kaden a que me acompañara por este.

Tomé el plato en mis manos y salí de la cocina, Kaden me empezó a seguir aún con la mirada en el celular, llegamos al exterior y nos sentamos en las sillas reclinables, me recosté por completo dejando el plato de pastel en mi abdomen plano, tomé el tenedor, tomé un pedazo y me lo comí, en ese momento me llegó una notificación a mi celular de una videollamada de Eiden, tomé el celular y contesté, en la pantalla apreció Eiden sin camisa recostado en su cama. Me di cuenta de que mi familia me estaba viendo y escuchando.

-Hola, Blondie -saludó

-Hola, Eid -sonreí- ¿sigues acostado a esta hora?

-Si son las 12:00 p.m. apenas, es temprano -rodó los ojos- ¿dónde estas?

-En casa de mis tíos -respondí- nos están escuchando

-Lo presentía -se burló- te ves preciosa

-Gracias -me sonrojé- como sea, ¿me llamas para algo?

-Que grosera, Blondie, en realidad estaba aburrido y quería escuchar tu voz, te extraño

Escuché los chillidos de mis tías y madre, y los gruñidos por parte de mis tíos y padre.

-También te extraño -admití- odio que estés enfermo y no puedas ir a la universidad

-Pronto nos veremos, lo prometo, Natalie y Austin me están volviendo loco -se quejó- necesitaba algo de normalidad de parte tuya, aunque pensándolo bien estas igual de loca que ellos

-¡Idiota! -me molesté

-No te creas, preciosa, si estas loca, pero amo tu locura

-Como te gusta hacerme sonrojar -negué

-Más o menos -empezó a respirar con dificultad- odio que me falle la respiración

-¿¡Y por que me hablas!? -me exalté- debes cuidarte que no te agüites y sigues hablando conmigo

-Es que en serio te extraño, Kim -sonrió- pero bueno, por esta vez te dejo por que siento que me voy a morir de asfixia

-¡Eiden! -elevé la voz- no te vas a morir, pero descansa, adiós

-Adiós, Blondie, intentaré dormir más, hablamos más tarde -se despidió

Colgué y dejé mi celular en la mesa de bebidas, levanté la vista hacia mis tíos y padres, todos, incluido Kaden, me veían de forma seria.

-¿Se les perdió algo? -enarqué una ceja

-¿Quería escuchar tu voz? -cuestionó papá

-¿Te extraño? -se interesó tío Izan