Pecado adictivo☑️☑️

Capítulo 12

Pov, s Kimberly.- 

Observé como la caja de metal se detenía en el piso, al voltear a ver a Eiden estaba de estaba interesado en un armario, sin pensarlo corrí hacia el, tomé su mano y sin darle tiempo de hablar lo hice esconderse con migo en el área de terraza, tapé su boca y señalé hacia el elevador, las puertas se abrieron y ambos nos congelamos, después hubo movimientos y luego un celular llamando.

-¡Rogers!, alguien se metió a mi casa, no se, el libro esta fuera del lugar, registren la casa empezando por el cuarto piso y si ves a alguien lo matas -habló un señor alejándose

-¿Que vamos a ser? -susurré

-No lo se, aunque gracias por salvarme 

-No hay de que -seguí- pero en serio, ¿que plan tienes?

-¿Que hora es?

Miré mi celular- las 3:45 a.m., los diez minutos pasaron 

-Así es, lo que significa que todos ya salieron menos nosotros -opinó- lo que no entiendo es porque nadie habló por el comunicador

-Tal vez tienen antenas que interrumpen la comunicación -pensé

-Es probable, Blondie, la cosa aqui es salir y no podemos hacerlo por los otros pisos, seguro que la policía ya esta en estos, hay que buscar otro lado

-Que tal por aquí -señalé el frente

-No sabia que tuvieras inicios suicidas, corazón -río- por si no te has dado cuenta es un cuarto piso, si caemos por aquí nos mataremos y si sobreviviéramos nos encontrarían abajo 

-No, mira -señalé hacia la esquina- hay tubos de tuberías, son resistentes, nos vamos por ahí y se que terminan del lado de tu coche, justo en un basurero

-Eres inteligente, Blondie, he de admitir, tenemos que hacerlo antes de que... -empezó

Escuchamos como unas pisadas se acercaban con rapidez, nos volvimos a pegar hacia la pared, me asomé con precaución entre las cortinas y la pared de adentro y observé como diez tipos entraban con armas y chalecos antibalas, tragué grueso.

-Tenemos que hacerlo ya, Kimberly -susurró

-Nos van a ver -me preocupé

-Entonces empecemos -opinó

Empezamos a alejarnos de la pared con lentitud, pude ver que los hombres observaban por todo el lugar, de pronto mi tacón soltó un fuerte "Toc" y me paralicé, me giré preocupada hacia la casa y todos nos estaban viendo, Eiden apresurado me tendió la mano, la tomé y pase el pequeño muro de la terraza, mis tacones tocaron el tubo de metal, me tambaleé nerviosa, pero me logré sostener de la pequeña pared que sobresalía, Eiden empezó a hacer lo mismo que yo, pero uno de los hombres de negro tomó su brazo deteniéndolo, me paralicé, Eiden intentó forcejear, pero el idiota no cedía, otro se acercó con su pistola y empezaron a subir a el pelinegro lentamente, preocupada mi vista se detuvo en el pantalón de Eid, había una pistola pequeña color plateada.  

-Tu no vas a ningun lado, imbécil -comentó uno de los gorilas

-Te vamos a torturar y luego desearas jamás haber entrado a esta casa -habló otro

Con rapidez tomé la pistola de sus jeans y apunté a el idiota que estaba jalando a Eid, parecía que todos me estaban ignorando, así que aproveché esa ventaja y sin pensarlo disparé, la bala le dio a el idiota en el brazo y soltó a Eiden, este se agarró de la pared con rapidez