All Too Well (Juliantina)

Era lo que necesitaba

2 MESES ANTES

Nunca pensé decir esto, pero tal vez Valentina era lo que necesitaba para aliviar el dolor que dejó Alma al irse. Y no me mal interpreten, no estoy hablando de amor...

-no hagas ruido- susurró mientras tapaba mi boca ligeramente, mis manos se deslizaban por debajo de su blusa -¿cerraste la puerta?- pregunto con la respiración agitada

-si- logre decir, ella sonrió ampliamente y continuó besando mi cuello, me estremecía al sentir como sus besos eran desesperados, como si de verdad quisiera arrancarme la piel.

Me fue acorralando hasta que mis piernas toparon con el borde del escritorio, sin pensarlo me senté en el y con mis brazos la acerque más a mi cuerpo, tomo mi rostro entre sus manos, me besó con fuerza haciendo que me faltara la respiración. 

El calor aumentaba a cada segundo y yo sentía la necesidad de deshacerme de su blusa, la desabroche dejando ver un brasier de encaje negro, no pude evitar sonreír y ella lo noto.

-¿te gusta lo que ves?- me saco por completo de mis pensamientos, subí la mirada para toparme con su clásico gesto geocéntrico, al parecer no había parte de su cuerpo en la que yo no me quedara hipnotizada, la observe por unos segundos y sin mas la tome por el cuello para besarla. Sentí como me empujo ligeramente hacia atrás, mordió su labio y me miro nuevamente -te pregunte algo- le gustaba ponerme en esa posición, darme un poco de ella y después hacer que ruegue por un poco mas.

-ya sabes la respuesta- intente besarla, pero ella me volvió a alejar, con ayuda de sus manos, se despojó ligeramente de la prenda para dejar al descubierto por completo su piel, sin pensarlo quise tocarla, pero nuevamente ella lo impidió.

-esa no es una respuesta- sonreía de manera atrevida, mire sus labios y no podía evitar querer besarlos

-me encanta lo que veo- dije de golpe, su sonrisa se amplio mas y no dude que su ego estuviera por los cielos, me abalancé hacia ella, sorprendiéndola por completo, últimamente mi cabeza era un mar de emociones, seguía molesta con ella, pero la deseaba, tanto que el sexo se volvía mas interesante.

Desabrocho mi pantalón con desesperación y de un solo movimiento termino en el suelo, con sus manos tomaba mis piernas apretando en exceso, mientras las mías se colocaban en su cadera, la atraía hacia mi para sentir más su torso desnudo sobre el mío, bese sus pechos y cuello en repetidas ocasiones, con algo de torpeza baje su pantalón, Valentina sabia a lo que iba, su conjunto de lencería me lo dejaba claro, me mordí el labio al ver dicho encaje negro y la tome con mas fuerza.

Su mano se posó entre mis piernas, un ligero gemido se escapo de mis labios, ella sonrió con satisfacción, me miró por un momento a los ojos he introdujo sus dedos en mi, una corriente eléctrica recorrió mi cuerpo, haciéndome estremecer, entraba y salía con cierta rapidez, me aferré a su espalda, disfrutaba demasiado pero la idea de que nos escucharan me estresaba, haciendo que eso le editara más. Baje mis manos nuevamente a su cadera, quería sentirla muy dentro de mi.

-no hagas ruido- repitió con una sonrisa, era evidente su juego.

Entre los movimientos de ella, baje ligeramente su prenda interior, introduje mis dedos en ella y su semblante cambio, ahora era yo la que tenia el control, comencé a moverme, mientras con la otra mano la acercaba mas a mi, sonreí al ver que la había desconcentrado de su juego, saco sus dedos, hice lo mismo pero solo para cambiar de posición, de un par de movimientos Valentina se encontraba arriba del escritorio, de manera torpe lo despejamos lo más posible y se recostó por completo, termine de quitarle el calzón, contemple el panorama por un momento y hundí mi rostro entre sus piernas, ella poso sus manos sobre mi cabeza, levante ligeramente la mirada solo para asegurarme de que estuviera disfrutando. Arqueaba constantemente la espalda, mordía su labio para ahogar cualquier tipo de sonido que su boca pudiera producir. Me separe de golpe y ella me miro sin entender.