Después de 7 años, Gustabo consigue escapar de la mafia de su madre y su tío, después de tantos años sufriendo de todas las formas posibles, espera volver y acabar su historia con un final feliz, pero una serie de cosas se interpondrán en su camino...
Gustabo dirigió su mirada al mecánico de peto rojo que acababa de entrar por la puerta, mirándole de arriba a abajo.
-Armando... Vete de aquí
-Cuanto tiempo rubito. -Dijo acercándose lentamente. Gustabo fue a coger unas tijeras que había en el escritorio, pero la mano del pelinegro se lo impidió, agarrándolo con fuerza
-S-Suélteme
-Por qué tartamudeas? Acaso no te alegras de verme? -Fue acorralándolo contra la pared, a tal punto que la espalda del menor chocó con fuerza en esta
-Que m-me sueltes maldito c-capullo. -Estaba nervioso, muy nervioso, y se podía notar a kilómetros
-Que rencoroso no? Yo solo quiero hablar con mi ex tranquilamente
-No soy nada tuyo. -La rabia se podía notar en su tono de voz, al igual que la impotencia y miedo; miles de sentimientos y recuerdos rondaban por la mente del rubio, y ninguno era bueno desde luego...
-Te han dado bien por el culo estos años? -Gustabo cerró los ojos con fuerza mordiéndose el labio, tratando de no llorar. -Sigues siendo el mismo debilucho
-Y tu el mismo gilipollas. -Logró decir Gustabo en un susurro poco audible, pero por desgracia sí para el mas alto.
La mano del mayor impactó en su mejilla con fuerza. Intentó soltarse de los agarres del otro pero era inútil, era una hormiguita comparado con él
-Q-QUÉ COÑ- Fue interrumpido por otra bofetada
-Cállate. -le medio gritó al oido, tapándole la boca con una mano. -Te voy a follar hasta romperte en dos zorra de mierda
Gustabo mordió la mano del pelinegro como pudo, dándole una patada en la espinilla.
-AYU- Armando le tapó de nuevo la boca, tirándole al suelo. Le pegó un puñetazo en la cara, y un codazo en la tripa.
-He dicho que te puto calles, o acaso quieres que me cargue a tu noviecito? - Gustabo negó repetidas veces, con falta de aire. -Pues calladito y quietecito.
-Para por favor... -Suplicó el rubio, sollozando.
-Que te calles, esto es culpa tuya, yo solo quería hablar. -Acercó sus labios a los del menor. -Todo siempre es culpa tuya, niñato. -Gustabo echó la cabeza a un lado, pero Armando le cogió del mentón besándole a la fuerza, y tocando todo el cuerpo del menor.
"Pogo enfadado"
Gustabo echó su cabeza para adelante del susto, dándole sin querer un cabezazo
-Ha si-sido sin que-querer perdón
-Ahora si te vas a enterar
"Gustabo, deja salir a Pogo"
"No, cállate"
"Pogo quiere matarle!"
Armando quitó los pantalones del rubio.
"Pogo va a salir"
"NO!"
"Se fuerte Gus, tu puedes con él, Pogo confía en ti"
El rubio, con el corazón en el pecho, se armó de valor, y sacando las fuerzas de donde no las tenía, de un rápido movimiento se subió encima de él, poniendo sus pies en las manos de este, para comenzar a repartir puñetazos por todo su rostro.
Un ruido de disparo interrumpió sus acciones.
Armando aprovecho el despiste y se subió encima suyo de nuevo, esta vez asegurándose de que no escapara con unos buenos golpes, y ya directo al grano
.-.-.-.
*Conway*
Dejé a mis agentes revisando la zona, mi mente ahora mismo solo se centraba en el rubio, debía llevarlo a casa cuanto antes.
Aparqué en el parking de comisaría, sobándome la cabeza entré a comisaría. Joder, lo que me faltaba, cientos de gilipollas tocando los cojones.
Me fije bien y vi a Horacio hablando con tres sujetos, espera, HORACIO?! HORACIO TENÍA QUE ESTAR CON GUSTABO ARRIBA!
-QUÉ COÑO HACES?! -Dije, acercándome a él. -TODO EL PUTO MUNDO FUERA DE AQUÍ, U OS ECHO A PORRAZOS, ANORMALES!
Todos se callaron, nadie se movió. Saqué mi porra, y todos salieron huyendo de comisaría
-SE PUEDE SABER QUE COJONES HACES AQUÍ ABAJO?
-No pararon de decirme que bajase super yo-
-TE VOY A DEGRADAR, CAPULLO!
Me di la vuelta para caminar hacia el despacho, pero Horacio me empujó rápidamente, oí dos disparos y me levanté inmediatamente, en medio segundo los pocos agentes que quedaban se encontraban rodeándole
-HORACIO! HORACIO CAPULLO QUE COÑO HAS HECHO?!
Me posicioné a su lado, noté que tenía un disparo en la pierna y en el hombro.
-Pu-Puntería de mi-mierda. -Rio Horacio.
-PERO NO TE RIAS! -Horacio sonrió. -LLAMAD A UNA AMBULANCIA Y ASEGURAD LA ZONA INUTILES. -Grité a los agentes que tan solo miraban a Horacio, recibiendo un "10-4" por parte de todos.
Con mis dos manos taponé las heridas, ambas no tenían orificio de salida
-Tra-Tranquilo yayo... Que es-esto no es nada p-para un héroe como yo. -Rio de nuevo
-Perdón por chillarte a veces crestas, me pongo nervioso y la pago con vosotros.
-Qué han he-hecho con mi verdadero J-Jacky?
-Hablé con Gustabo, eso es todo capullo, y no me llames así
Las sirenas de la ambulancia se podían distinguir entre el alboroto.
-Ve a v-ver como esta G-Gustabo, debe d-de haber oido el di-disparo.
Asentí, viendo como los EMS se acercaban rápidamente con una camilla, les ayudé a subirlo a esta y se marcharon en menos de medio minuto.
-Limpiad esto. -Señalé el charco de sangre.
Ahora sí, me dirigí rápidamente al despacho, muy preocupado por el de cresta, él y yo teníamos una extraña relación, pero lo raro no deja de ser bonito.
Oí unos sonidos extraños subiendo las escaleras, me extrañé y corrí.
Para mi sorpresa la puerta estaba cerrada de dentro y el pequeño cristal que había en la puerta era tapado por la cortina. Desde dentro podía escuchar suspiros y sollozos, MIERDA
Saqué mi pistola y me cargué la cerradura, entrando rápidamente.
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Hola beibis como andan???
Siento si hay alguna falta, voy un poco wiwa y no veo bien, corregidme con cualquier cosa
Un besis de fresis
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