𝐻𝑒𝑙𝑙𝑜, 𝐶ℎ𝑖𝑐𝑜 𝐷𝑒 𝑂𝑗𝑜𝑠 𝑉𝑒𝑟𝑑𝑒𝑠 [𝑇𝑒𝑟𝑚𝑖𝑛𝑎𝑑𝑎]

-¿Azules?

Aidan se encontraba frente al espejo de su habitación mirando con detenimiento sus ojos y tratando de encontrar eso que T/N le habia mencionado en el baile. Movía la cabeza de izquierda a derecha y de arriba hacía abajo pero no había nada distinto en ellos.

-¿Qué haces, hijo? -preguntó con diversión Lauren dejando un cesto de ropa limpia sobre su cama.

-Estoy viendo si mis ojos son azules o algo así

-¿Azules? Aidan hijo -ríe acercándose a él y lo toma por los hombros sin dejar de verlo a través de espejo-, tus ojos son verdes, desde pequeño siempre haz tenido un par de ojos verdes.

-Lo sé pero es que‐

-¿Quién te ha dicho que son azules?

-T/N, ella dijo que mis ojos tenían un brillo especial y que si me acercaba a la luz mis ojos podían llegar a parecer azules, pero yo sigo viéndolos verdes

La adulta asintió entendiendo todo-Tus ojos son verdes cariño, pero cuando estas cerca de una luz natural, el reflejo de la luz hace que puedan llegar a verse de un verde azulado. Con respecto al brillo, si lo tienes. Desde pequeño cada vez que sonríes -beso su mejilla y el chico sonrío moviendo su mejilla hacia su hombro-aparece ese brillo tan particular en tu mirada -beso su otra mejilla y lo apretujo contra su pecho

-Me haces cosquillas -murmuró risueño

-¿Mi pequeño aún tiene cosquillas? -pregunta sin dejar de mirarlo a través del espejo.

-Si mamá, aún tengo cosquillas

-¿Y se puede saber quién es esa T/N que dijo que mi niño tiene ojos azules?

-Es la hermana de uno de mis amigos y‐ -se calló abruptamente abriendo sus ojos.

-¿Y?

-Ay, dios. Mamá ella quedó en que iba a venir a la casa y lo he olvidado -se giró para quedar cara a cara con su madre-Mi habitación es un desastre y no hemos preparado algo para comer o para ofrecerle.

-Hijo, tranquilo. Tu padre y yo ya hemos hecho la comida, si quieres te ayudo a ordenar o‐

-No, no. Yo recojo aquí y si me hicieras el gran favor de preparar algo de fruta picada, te lo agradecería muchísimo mamá -el castaño ya se encontraba yendo de aquí para allá por la habitación, recogiendo medias regadas, zapatillas, cuadernos y tendiendo su cama.

-Fruta picada, lo tengo -y salió de la habitación para ayudar con ese detalle a su hijo.

[...]

-Recuerdame a dónde es que vas

-A casa de el chico de ojos verdes

El rubio asintió.-¿Y a qué? -pregunta mientras mira a su hermana ir de aquí para allá por toda su habitación

-Haces muchas preguntas, ¿no?

-Ey. Sólo me preocupa mi hermana y sus intenciones de ir a casa de Gallagher

-Voy a ir a que me ayude con la guitarra y esas cosas -responde moviendo su mano con desdén

-¿La guitarra? -su hermana asiente-Try y yo tratamos de ayudarte o incluso pudimos tratar nuevamente nosotros

-Si, pero el chico de ojos verdes se ofreció e insistió. Y créeme que insistió mucho -asiente recordando como en verdad el chico había insistido en ayudarla hasta que esta no le quedó más remedio que aceptar.