◈【4】◈

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Tic- tac, tic- tac.

Allen no dejaba de ver y oír ese odioso reloj en la pared y se preguntó a sí mismo por qué lo compró sabiendo que le causaría un gran desborde de nervios.

Estaba sentado en el sillón cómodo que tanto adoraba SeRim, esperándolo con la cena servida que yacía abandonada en el comedor con las velas encendidas y un vino que sabía que le encantaba al mayor

Se rindió a media noche, soplando el fuego dejando la casa en absoluta oscuridad y como por arte de magia, mientras subía las escaleras la puerta principal fue abierta y se quedó estático, sin expresión alguna.

— ¿Qué haces despierto, Allen? — Preguntó con el abrigo en la mano, dejando las llaves del auto sobre el buró

— Es tarde— Musitó bajito

— Precisamente por eso, no deberías estar... ¿Qué es esto? — Observó la perfecta mesa y abrió la boca ligeramente— Allen...

— Feliz mes— Elevó los brazos y los bajó restándole importancia— Si tienes hambre recalienta en el horno, estoy cansado. Buenas noches.

— Allen, cielo, Dios... — Se pasó las manos por la cara— ¿No celebrábamos solo los aniversarios?

— Y los meses— Especificó— Cinco años y algunos meses, no tantos, no te preocupes. Da igual.

— Mierda, lo siento, yo...

— Es por ese mocoso, ¿No? — Su vista cayó al suelo y allí se quedó— Supongo que me dirás que no es WooBin, pero que continúa llamándote y buscando salidas absurdas para hablar de temas importantes

Odiaba ese nombre, ese omega...

Iban bien en su cuarto año de novios. Vivían juntos hacía tiempo y la convivencia no paraba de mejorar

De pronto un día llegó del trabajo siendo cualquier cosa, menos SeRim y desde ahí supo que lo perdió. Lo confirmó cuando lo vio besarse con un omega de mejillas regordetas

SeRim intentó explicarse, decía continuamente que perdió la cabeza y se dejó llevar por un momento, un joven sin gracia. Sin embargo, ese joven seguía detrás de él y el alfa simplemente no sabía poner un punto final.

— Allen, hemos hablado de esto

— Sí, la última vez juraste haberlo borrado permanentemente de tu vida y resulta que tu registro de llamadas decía otra cosa— Se rascó el codo, bastante calmado. Él no podría estallar jamás, era paz por doquier— Estoy seguro de que HyeongJun y el vecindario entero lo saben

— Porque hiciste una rabieta

— ¿Rabieta? ¿Rabieta es pedirle a mi alfa que deje a su sucio amante? Un año, SeRim, uno esperando a que cambies— Se acercó peligrosamente— No soy yo el que debe poner los pies sobre la tierra

— No vamos a empezar— Ladeó la cabeza con cansancio y una expresión exasperada. SeRim no tenía idea de cómo demonios arreglar su relación y, por el contrario, seguía quebrándola

— No, tienes razón— Tomó aire recobrando la compostura, posicionando una mano sobre el vientre plano que poseía— Tengo mejores cosas que hacer mañana.

Nunca supo de dónde había sacado tanta valentía, pero desde el día en que sintió náuseas, mareos y sueño excesivo supo que ya no era solo uno y allí, sentado en el retrete con una prueba de embarazo casera y positiva se dio cuenta que debía ser menos sumiso.

SeRim era su predestinado, el amor de su vida y posiblemente dejarlo lo llevaría a la muerte, pero había visto eso en la familia de su pareja... Omegas solteros criando hijos solos para después conocer el verdadero amor.

𝐒𝐓𝐀𝐘 ◈【MiniSong+ SelLen 】◈Where stories live. Discover now