𝐒𝐓𝐀𝐘 ◈【MiniSong+ SelLen 】◈

◈【13】◈

— Allen, despierta son las dos de la tarde, no puedes estar acostado el día entero... — TaeYong abrió las cortinas y dejó algo de ropa sobre la cama— Cámbiate, te espero abajo con el desayuno.

El aludido se hizo diminuto bajo las mantas, cubriéndose la cabeza con los ojos aguados y el corazón a mil.

Odiaba esa fecha.

Veintiséis de febrero. Hoy, si siguieran juntos... Él y SeRim cumplirían seis años.

Era de esos días horribles donde se sentía cruelmente derrotado, como si hubiera dado batallas durante mucho tiempo y finalmente se diera cuenta de que tenía en el pecho lleno de huecos y trozos destruidos por doquier.

Era un momento donde tenía que llorar en silencio mientras recogía las partes que le fueron cortadas en medio de la guerra y por si fuera poco, coser con paciencia estas para enfrentarse al mundo sabiendo que probablemente otra vez lo harían trizas.

Allen odiaba esa fecha desde hacía un año porque fue ahí cuando las cosas cambiaron y habría deseado que fuera distinto.

Quizá sonaba tonto que le doliera llevando separados un tiempillo, pero lo cierto es que a veces no nos damos cuenta de cuán lastimados estamos sino hasta un punto específico.

Él se dio cuenta de lo muchísimo que amaba a SeRim y del daño que recibió cuando este por fin lo quiso de verdad.

¡Y diablos! Él no sabía si sentirse feliz porque quien lo rompió lo reconstruía a diario (O lo intentaba) o si acabar con la historia y arriesgarse a morir y dejar a sus bebés solos.

Le daba rabia, se suponía que la bonita marca que se trazó en sus cuerpos al formar el lazo significaba que eran predestinados, que duraría una eternidad y que sería un amor de película

Qué cruel era el destino

Intentó dejar de pensar en ello y se fue a la ducha con un semblante triste.

SeRim estaba de viaje desde hacía ya dos días, volvería en una semana o más y eso le producía un malestar peor.

Bajó a desayunar sin ánimo, TaeYong y JaeHyun levantaron la mirada. El olor a tristeza era notorio y como si de un niño se tratase, lo invitaron a sentarse y contarles lo ocurrido

— Seis años... — Sollozó secándose las lágrimas con un pañuelo que el alfa le ofreció— Seis años en la basura

— No están en la basura, cariño— TaeYong quitó los mechones de su cabello y los acomodó apropiadamente— Tendrán dos bebitos bellísimos que serán fruto del amor que tuvieron en el pasado.

— SeRim me trata como si estuviera enamorado, pero...

— ¿Qué tal se haya dado cuenta de lo que perdió y esté intentándolo?

— Jae, eso es obvio. — El omega apretó los labios— ¿Tú le crees, Allen?

— Sí... Eso no quita el hecho de que sea duro para mí. No me siento preparado.

— ¿Qué fue lo que les sucedió?

— Yo... Pienso que se aburrió de mí, ¿Saben? Dios, TaeYong— Lloró con lástima— Me criaron para ser el omega perfecto, fui diseñado para eso estuve toda mi vida preparándome para conocer a mi alfa y... Y atenderlo, darle amor, ser leal y correcto y yo... Yo... — Hipó tomando aire— No sé qué falló, de un momento a otro ya no era mío

— ¿Nunca fuiste tú mismo con él? — JaeHyun le ofreció otro pañuelo

— Nunca fui yo mismo con nadie. Pensaba que debía ser el indicado, el omega perfec...