Varian One-shot

Enredados en un mundo de cabeza 7

(anteriormente)...

-¿De donde la sacaste?- su mirar se poso inquieto contemplando la corona, el reflejo de furia que se poso en su pecho, lo que las gemas esmeralda reflejaron solo para dejar escapar una ultima gota hecha de sal y pena inmensa que se acunaba en su tormento, intentando aun sonar con firmeza sin dejar desbordar el desprecio hacia aquel hombre que hacia llamarse su padre, todo lo que escuchaba era el eco, el eco de las voces en su cabeza, fragmentando el significado de compostura, cuestiono por lo bajo, mientras su mirar desganado reflejaba las gotas de sal que prisioneras del dolor se encontraban, el rubio detuvo secamente su camino para voltear y esa mirada verde enerbo de indiferente sentir fue la que respondió por el-

Trevor- ¿disculpa?-su voz se escucho exigente y igual de indescifrable en emociones al igual que su expresión, vagas y profundas que no reflejaban absolutamente nada, un ser tan muerto en vida, y vivo por odio era lo que se reflejaba en el espejo de su alma tan podrida cual manzana envenenada -

-exijo una respuesta- arrojo la corona hacia el rey del aquel reino pleno de prestigio, el cual sin problema atrapo con delicadeza y sin dificultad alguna la dorada corona de piedras valiosas, la sostuvo en una mano solo para acunarla en ambas sin si quiera cambiar su expresión de suma indiferencia-

Trevor- la dejaste... al igual que dejaste a tu reino- reprocho para mirarle sin ningún remordimiento en el reflejo enerbo muerto en sus ojos, si quiera parpadeo al mentir y su sínica sonrisa permanecía estar disfrutando el dolor que se reflejaba en su ser, la pena inmensa y el divagante dulce sufrir que estaba sintiendo, solo era un motivo de burla, parecía sentirse felizmente victorioso ante su jugad, sin embargo no hubo respuesta alguna de su mar, el silencio que solo hacia ver lúgubre el lugar que era gobernado por los latidos de un desesperado y herido corazón, fueron tomados como respuesta, su mirada paso por todos lados inquieto, cada segundo del cual solo hubo una respuesta, nada mas que la confusión paso por su rostro-te sugiero que comiences a prepararte para la cena- fue ultima palabra antes de que el sonido de la puerta corrompiera el silencio causando un profundo eco, en el cual ____ uso para sumirse en un mar de pensamientos, el sentimiento de que algo estaba mal, caminando en la desgarran te melodía de la ausencia, para en sus manos tomar lo que quedaba de la frágil corona de flores marchitas de pena, un corazón de latir afligido que se inundo en lagrimas oprimidas por su pecho, el cual susurro antes de que la razón ganara sus palabra llenas de pesar-

una mirada perdida en la poca esperanza que quedaba en su frágil latir, en el ventanal de la lúgubre alcoba el sol brillaba y el melódico canto de las aves y canarios era hermoso sin embargo no de la misma forma que antes lo había sido, solo llegando a obtener un latir desganado , de un mirar de cristal que contemplando el reino, pensando en todas las noches frías y lejanas cual fiordo invernal, las lagrimas que descendían por sus mejillas para ser atrapadas por la rota y marchita corona, todo lo que había sentido se desvanecería en el aire, en dias y noches de desbordante en el abismo que inundaba sus pulmones sin dejarle respirar, sabiendo que las lagrimas que caían serian el mar en el que se hundiría, el afuera, donde por cuatro dias de ellos fue el mas bello sentir que se acuno en su pecho, la suma alegría que desbordo, las emociones que llego a experimentar por primera vez, miedo, angustia, valentía, determinación, felicidad, tantas emociones que no podían describirse en palabras y sobre todo no podían describirse en ese larimar mirar con el cual se había encontrado en una alejada torre... incluso si, incluso llego a pensar en que seria si pudiera vivir, si su corazón latía,  podía tener el aire en sus pulmones pero no podía respirar, no podía evitar pensar en todo, en cada segundo, en cada latir, mientras que miraba el día mas oscuro que alguna vez logro sentir, desmoronante y cruel arrebato por una corona, y esas palabras hicieron un eco que giro a lo largo del inmenso vacío.

La corona, su corona,  en ese momento su mirar la busco, estaba posada en cama, pero al verla algo no estaba bien, no concordaba, algo estaba mal, su mirar se quedo fijo mientras comenzaba a acercarse lentamente paso a paso, hasta llegar a tomarla en manos,  sus latidos se aceleraron de forma cual marea en el frio cielo nocturno, dorada corona de oro con de esmeraldas fragmentadas por sus descuidos, fue cuando toda la niebla de la tormenta comenzó a desvanecerse creando un giro lleno de tumultos, latidos  que se había oprimido una vez mas, su estomago dio un vuelco que lo revolvió por completo todo en su interior, su respiración comenzó a acelerarse al punto de quedar sin aire alguno, el eco de las campanadas del fin del mundo lograron escucharse con las voces que llegaron a su cabeza, su mirar se poso en el reflejo de esmeraldas, la corona se había quedado en la... en la torre.