Un dìa tus padres deciden mudarse a una pequeña ciudad, Beacon Hills, por temas de trabajo, hay haras buenos amigos y quien sabe... Quizás te enamores.
Mi vista se nublo y al poder ver de nuevo pude observar que me encontraba delante de todo un ejército de gente armada, estaba algo desconcertada, lo último que recordaba era estar abrazando a Derek. Mire mis manos envueltas en fuego y con un giro de muñeca lo detuve, me quedé mirando a todas esas personas, las mayoría estaban mirando hacia mí derecha paralizados, asustado, incluso algunos con los ojos llorosos.
- Gabe no - escuché decir y me giré hacia el sonido encontrándome con un chico de mí instituto, el mismo que había estado aquel día en la comisaría, estaba sujetando la cabeza de su amigo que al parecer había recibido un disparo.
- Gerard ¿Qué has hecho? - le dijo Monroe.
- Ellos me han obligado ha hacerlo, ellos son los monstruos - dijo poniéndose delante de la multitud dándonos la espalda - NO PODEMOS SEGUIR ASÍ, RODEADOS DE ESTOS SERES QUE SOLO BUSCAN EL MAL PARA NOSOTROS, YA ESTA BIEN DE MIRAR A OTRO LADO SABIENDO QUE GOBIERNAN NUESTROS BOSQUES, NUESTRA CIUDAD, QUE PONEN EN PELIGRO A NUESTRAS FAMILIA, HAY QUE MATARLOS A TODOS - volvió la vista de nuevo hacia nosotros y levantó su arma siendo seguido por los demás, me asusté, tenía cientos de armas apuntando cada centímetro de mi cuerpo con la intención de matarme, solo retrocedí un poco para ponerme al lado de los demás. Ahora estaba entre Peter y Derek, levanté mi mirada hasta este último y el hizo lo mismo, yo solo entrelacé mi mano con la suya sin decir nada.
- Me...me duele - fue lo único que se escuchó en esos segundos de silencio que estábamos experimentando, alguien se movío detrás de mí y giré la cabeza viendo cómo Theo se acercaba al chico.
- Dame la mano - le dijo con un tono bajo, el chico negó con la cabeza - Vamos, solo quiero ayudarte - el chico movió la mono hacia él y Theo la cogió absorbiendo su dolor, todo el mundo se quedó observando la escena el silencio, lo único que se podía escuchar eran los ruidos de dolor que emitía Theo. Solté la mano de Derek y me acerque a ellos sujetando la otra mano del chico para absorber su dolor, Theo me miró con una media sonrisa triste en forma de agradecimiento.
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Pasó un momento y soltamos la mano de chico.
- ¿Te sigue doliendo? - pregunto Theo.
- No - sonrio débil - gracias y lo...lo siento por todo.
- Tranquilo, no pasa nada - le dije poniéndole una mano en el hombro - puedes acercarte - avisé a Nolan, él estaba llorando por su amigo y es normal, recuerdo como eran en el instituto, daba igual cuando les miraras siempre estaban juntos, él se acercó.
- Lo siento, lo siento mucho Gabe - dijo agachándose junto a él.
- No te preocupes, tú tenías razón, no son malos - miró triste a su amigo - tenía que...tenía que haberte escuchado - le confesó para después cerrar los ojos.
Mientras pasaba todo esto ni si quiera me había dado cuenta de que la gente había bajado sus armas.
- ¿QUE HACÉIS?, OS MATARE A TODOS, TRAIDORES, ACABARE CON ESTO - grito Gerard.
