Capítulo 19: Soy Tu Juguete

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- Si, si - una pelinegra caminaba por su casa - Está bien, mamá

- No me digas mamá - Wendy golpeaba a Lisa - Yo soy menor que tú

- Pero vives regañándome como si lo fueras - hacia un puchero - ¿Qué tal me veo?

- Pareces... No sé ¿una cosa rara? - todos se empezaron a reír

- Ja, ja, muy chistosa - se acomodó su chaqueta de cuero - Me estoy vistiendo como los chicos de esta época

- Eres un fósil viviente conocido por toda la humanidad. Por Dios, eso que hiciste hace una semana aún está en las redes. Eres un héroe - Seulgi sonrió - Eres nuestro héroe, nos salvaste de morir

- Si, si - se miraba al espejo - ¿Pero cuando se largará a Roma?

- ¿Ya nos estás echando? - Seulgi se hizo la indignada - Pues te tengo noticias, no me iré. Incluso los demás vendrán con sus parejas, tenemos que darles un último adiós a los chicos

- Lo sé - la vampira respiro lentamente - No quiero hacerlo, pero ellos dieron su vida por mí, por nosotros. En fin - aplaudió - Me iré, nos veremos después, Señoras

- Cuídate, los vampiros están como locos después que llegaste - Wendy la tomo del hombro - Nos llamas cualquier cosa

- Si, mamá - sonrió la vampira para salir corriendo hacia su auto

Todo el mundo hablaba de ella y eso le gustaba, quería hacerse conocer y lo estaba logrando. Los elogios por parte de su tía no se hicieron esperar, los soldados que fueron con ella a esa tierra se fueron a sus respectivos hogares después de que la Capitana le diera un buen sermón de apoyo mirar y les prometiera muchas cosas, cosas que fueron cumplidas por su tía. Sus riquezas aumentaron y ella paso a ser una gobernante sin título de aquel lugar. Pero había una chica que nunca se volteó a mirarla y más después de lo que se enteró

Lalisa bajo de su Camaro sonriendo colocando sus lentes. Las chicas y los chicos no apartaban la vista de ella y con aquel porte elegante llegó hasta las puertas de un salón de clase. Se apoyó en la pared y comenzó a jugar con su celular, muchas chicas pasaban y le tomaban fotografías, murmuraban cosas y ella las escuchaba perfectamente. Las puertas del salón se abrieron y las personas se sorprendieron cuando la vieron allí apoyada en la pared. Jennie salió con Rosé a su lado, ambas estaban sorprendidas, a su espalda estaba Jiyong con Sehun 

- Oh, oh. Es Lalisa - Rosé iba a abalanzarse en los brazos de la vampira cuando Jiyong la detuvo - ¡Oye! ¿Qué haces?

- No te acerques, ahora es una asesina - los hermanos estaban de frente - Ella no es buena para ninguno ahora

- Oh, sí. Claro lo olvidaba. Tú eres el hermano bueno, el príncipe, el general Bonucci, o bueno ahora eres Kwon, ¿Usas el apellido de tu madre? Qué irónico - la chica sonrió

- ¿Qué haces aquí, Manoban? - Jiyong también sonrió - Ahora eres un héroe, no tienes por qué estar aquí

- Vengo por mi chica - Jennie bajo el rostro sonrojada - A menos que ya... - Jiyong tomo la mano de Jennie - Vaya, ahora entiendo todo - la chica negó y se dio la vuelta - Por eso te fuiste... Ella es tu alma

- ¿Qué, si lo es? Tú solo juegas con ella, tú no la amas. Juegas a la casita con ella después de que Irene murió - la chica negó y sonrió

- Debí escuchar a Lauren, sabes está vez no fui la única en apagar su humanidad. Taeyang, Daesung, TOP, Seungri. Tus mejores amigos, fuertes guerreros bajo el mando de la Empaladora - en eso dos ráfagas de viento se colocaron en la espalda de la vampira - Vaya, ya llegaron mis amigos

Bajo La LunaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora