Parte 6

2.2K 318 159
                                    

XiChen se puso en pie y busco por el lugar, no había muchas cosas, no sabía que hacer sus manos nerviosas sudaban, se sentía tan enredado como un pequeño que estaba aprendiendo.

- ¿Qué busca? – Jiang Cheng se puso en pie y noto el nerviosismo del jade, no es que Jiang Cheng no lo estuviera, pero después de sacar aquello que le oprimía su pecho, se sentía mejor, no tenía tiempo para lidiar con otros sentimientos.

-Algo para distraerlo – XiChen fue sincero y Jiang Cheng amplio su sonrisa.

-No creo que halle algo, la mayoría de cosas fueron las que recupere de mi madre, no hay algo interesante.

Zewu Jun suspiró, así que por eso había tantos adornos de cabello, finalmente halló un pequeño loto hecho en origami.

- ¿Era su juguete? – Cuestionó alzándolo

-De mi hermana – Respondió – Yo no tenía juguetes

- ¿Por qué?

-Eso te distrae de ser un buen líder, todos ellos te van a seguir, ¿crees que seguirían a alguien que tiene juguetes? - XiChen miro incomprensivo – Eso lo decía mi madre – XiChen formo una sonrisa en sus labios y asintió.

-Yo tampoco tenía juguetes, pero me gustaba leer – Cuando visitaba a mi madre, ella solía molestar a WangJi, era divertido verlos, a veces solo me quedaba viéndolos, otras veces leía algún libro que madre tenía en su habitación – XiChen dejo el juguete en la mesa y miro fijamente al otro.

-Eso es algo predecible del cultivador número uno – Jiang Cheng sonrió, pero pronto esa sonrisa desapareció como un parpadeo - ¿Nunca se sintió presionado por ser un líder?

- No tanto, crecí aprendiendo sobre eso y solo quería dar lo mejor, mi tío me explicó los preceptos importantes, ser justo; aunque no sabía cómo serlo, recuerdo que pensaba que si leía lo suficiente podría conocer el mundo, podría ser una persona justa, pero entre más leía, más preguntas surgían, hubo un tiempo en que no dormía, porque quería leer y acabar pronto.

- ¿Enserio? - Jiang Cheng pregunto de verdad sin creerlo.

-Si, así fue, mi tío me castigo encerrándome en mi habitación y se llevó los pergaminos y libros, puso un talismán en mi cuerpo para que no me moviera, me hizo descansar por tres días – Jiang Cheng volvió a sonreír.

-Eso es algo increíble, supongo que era como cuando madre quería que Wei WuXian se estuviera quieto, solo que ella no usaría un talismán y no podía encerrarlo, padre seguramente se enojaría – Sus ojos nuevamente parecían perder algo de brillo.

- ¿Qué hay de usted? ¿lo castigaron mucho? – XiChen notaba que, pese a que Jiang Cheng trataba de contar su vida, siempre terminaba desviándose hacia el joven Wei.

-No tanto, madre siempre me regañaba y gritaba, a veces sostener algunos bloques, pero nunca fue realmente un gran castigo y mi padre, bueno, él era él, así que estaba ocupado.

-Pero... Yo vi ... - Jiang Cheng alzo una ceja, XiChen se señaló su pecho, temiendo tocar un tema sensible, las cicatrices eran del látigo de disciplina, entonces solo los señores Jiang tenían ese derecho.

- ¡Oh! Eso – Jiang Cheng agacho su mirada hacia su pecho, algo oscuro se posó en sus ojos - No me lo hizo ni mi padre, ni mi madre – Respondió, justo cuando XiChen trato de decir algo más, solo decidió callarse. Mientras la mirada de ojos violetas enfocaba un punto fijo.

-Creo que debería ir por la comida – XiChen comento, pero Jiang Cheng nuevamente no lo escuchaba – WanYin, ¡WanYin! – Un muro, eso era lo que sentía, era inútil hablar con Jiang Cheng, era inútil porque siempre había algo más, sus brazos se movieron y rodearon al hombre, lo apoyo en su pecho

Soñando en muelle de lotoKde žijí příběhy. Začni objevovat