Después de terminar mal herida, eres recatada por un chico con un dragón tatuado en el cráneo, lo que no esperabas es que ese encuentro sería el inicio de una nueva vida que dejará al desnudo tu pasado y tal vez algo más.
- contenido de violencia y...
La siguiente mañana llegó sin siquiera darme cuenta, hablé con la señora Kawata (mi jefa) para que me dejara realizar nuestra mudanza en mi hora de trabajo, a lo cual no tuvo problema, el departamento era pequeño y estaba al fondo de un segundo piso, pero era perfecto para nosotros, al menos ya tendríamos habitaciones individuales.
Llevé a Akihiro a la escuela, a mitad del camino quedaba tanto mi trabajo como el departamento, así que fui por las llaves.
- Aquí tienes hija, me tomé la libertad de limpiarlo para ustedes, así que ya puedes empezar a acomodar tus cosas - me dijo la señora Kawata mientras me entregaba las llaves
- De verdad, muchas gracias por la ayuda - dije mientras hacía una reverencia
- No tienes nada que agradecer, quiero ayudarte en lo que se pueda, ¿Cómo va esa herida, necesitas medicamentos o algo? -
- No, justo ahora iré a comprar lo necesario -
- De acuerdo, pienso darte dos días para la mudanza, si necesitas mas me dices ¿de acuerdo? -
- Claro, muchas gracias -
Regresé a mi motocicleta y partí a la casa de mi madre, la cuestión ahora es como cargar esto en una moto, podía ser peligroso, pero aun estaba lejos para poder ir caminando, pero creo que esto era la mejor opción, como pude me cargué con tres bolsas y comencé a caminar.
Caminaba por las calles de Shibuya solo concentrada en que no se callera nada y en ignorara el dolor de mis costado.
- Así que veo que no moriste - una voz realmente familiar me hizo pegar un pequeño brinco, bajé las bolsas y giré en dirección de la voz
- Taiju... ¿Qué es lo que quieres? - cada vez que lo veía sentía una furia caliente creciendo en mi cuerpo, pero también un cosquilleo en mi estomago que me solía dejar completamente confundida.
- Hey tranquila, solo quería ver si estabas bien, supe que te apuñalaron el viernes -
- ¿Cómo te enteraste de eso? -
- Vamos, sabes perfectamente que aunque saliste de ese mundo tu nombre sigue causando impacto, bueno, mas que tu nombre...tu seudónimo... ¿no es así conejita? - mientras hablaba se iba acercando a mi lentamente, y en la ultima parte tomó mi rostro con una de sus grandes manos, sin pensarlo me alejé de su tacto.
- Bien, alguien no esta de humor para charlas, entonces déjame ayudarte con lo que sea que estés haciendo -
- No necesito tu ayuda -
- Pues esa sangre que comienza a salir de tu costado indica otra cosa - miré hacia mi abdomen, y efectivamente la herida estaba sangrando, no era mucho, pero se podían notar unas manchas rojas sobre mi playera blanca.
- Mierda - dije mientras levantaba un poco la playera para ver el vendaje
- Tranquila, no creo que se rompieran los puntos, pero tampoco creo que tengas que estar cargando estas cosas - dijo mientras se cargaba las tres bolsas negras sin ninguna dificultad - ¿A donde vas? -
- Me estoy mudando -
- ¿Y esto es todo lo que tienen? -
- No, es lo que pude cargar -
- JAJAJAJAJA... mi auto esta por aquí, vamos, te ayudare a mover lo que necesites -
- No, lo ultimo que quiero es deberte un favor -
- No me deberás nada, esta vez de verdad quiero ayudarte - Me quería negar por completo, pero sabia perfectamente que para terminar hoy y no volverme a desangrar lo necesitaba, no tenia amigos, y creo que por primera vez Taiju se estaba ofreciendo a ayudarme, o al menos eso quería pensar.
- De acuerdo -
- Vamos preciosa -
- No me digas así -
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Realmente creo que todo esta estructurado en mi cabeza..ahora solo tengo que pasarlo a palabras y creo que no voy tan mal
