Capítulo 11

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*Fiesta de Bienvenida*
*Diana Dawson*

El vuelo se me había pasando volando, literalmente. No paraba de pensar en Gael. Nunca antes ningún chico me había gustado tanto, nunca había sentido que una mirada me ardiera en la piel, que me quemara.

Estaba triste porque regresar a Los Ángeles significaba dejar de verle, y feliz porque extrañaba un montón a mis amigos. En fin, que estaba hecha un verdadero lío.

En las afueras del aeropuerto me estaban esperando mis mejores amigos. Los ojos se me cristalizaron al ver al idiota de Kenneth, a Kenny y a Kimberly. No, sus nombres no son con K por pura casualidad, es que son hermanos y los tres son mis mejores amigos desde hace muchos años.

Ellos corrieron hacia mí apenas me vieron y me envolvieron en un cálido abrazo grupal. Los había extrañado tanto.

__¡Por fin regresas!__ chilló Kimberly

__Au, Kenny, por favor, mis pulmones__ me quejo porque él abraza muy fuerte siempre.

__ Te olvidaste de mí, Diana Dawson, ¡No te lo perdonaré!__ bramó Kenneth.

__Oh Ken, ¿Ya te he dicho alguna vez que ni William Shakespeare podía hacer tanto drama como tú?

Él solo rodó los ojos y yo sonreí antes de lanzarme a su cuello. Extrañaba tanto a este par de idiotas.

__¡Kenneth, agarra una de las maletas y ayúdala! Luego te encanta decir que te prefiere a tí __ bromea Kenny.

Ambos son gemelos. Tienen el cabello negro y lleno de rizos. Sus labios son carnosos, generalmente húmedos. Miden exactamente uno noventa. Sus pieles son blancas, pálidas y perfectas,  pero ellos no son exactamente iguales. Kenny tiene los ojos color verde oscuro, mientras que Kenneth tiene heterocromía, uno de sus ojos es verde oscuro y el otro del color del fondo del mar, un azul oscuro y profundo. Kenny tiene algunas ondas en su cabello, mientras que Kenneth lo tiene completamente rizado y, por último, Kenny es menos hablador y maduro, Kenneth es todo lo contrario. Es decir, que su parecido físico es enorme, pero sus personalidades son distintas en su totalidad.

__¡Venga Kimberly, deja de hacerle un boomerang a las maletas de Diana y mueve tu gordo trasero hasta aquí! __Grita Kenneth a la misma vez que abre el maletero de su Mercedes.

__¡Dios, necesito ser recompensada por la infinita paciencia que le tengo a este par de idiotas!__ Dice Kim con voz lastimera mientras mira el cielo.

Kimberly fue premiada con un hermoso par de ojos azules que heredó de su madre Daniela. Tiene un parecido increíble con sus hermanos. Sus labios son menos carnosos pero igual son envidiables, los míos son carnosos pero los de ella son más sexys. Su piel blanca y perfecta y su cabello negro es tan largo que llega a su espalda baja y generalmente anda con él suelto. Ella quiere ser periodista, así que como podrán suponer tiene un don sobrenatural para el chisme. 

Los gemelos cargaron mis maletas y las metieron dentro del maletero del coche. Kim se sentó en el asiento del copiloto.

__Yo conduciré. Amo este precioso bebé. __Comentó Kenny. Él realmente ama a los coches y todo lo que tenga que ver con coches.

Así que Kenneth y yo nos sentamos en el asiento trasero. Kim pone la radio del coche y comienza a sonar Before You go de Lewis Capaldi. Kenneth tenía puesto un pulóver ancho con el fondo blanco y un Bob Esponja enorme en el centro, un chandal de color negro con dos líneas blancas a ambos lados, además de unos calcetines amarillos que sobresalían por fuera de sus tenis de colores súpertoscos. Tenía un arete en una de sus orejas del cual guindaba una pequeña cruz plateada y de su cuello colgaban cadenas que eran bastante parecidas.

Tentación [En Edición]Where stories live. Discover now