The dragon's fortune (Completa)

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— Lisa, esta nevando —se quejo Jennie desde la seguridad de su casa viendo a la pelinegra arreglar al venado—

— Mejor, así la carne dura más —dijo Lisa en respuesta cortando en la parte del estómago y sacar las tripas del animal en una cubeta— Con esto podemos hacer comida también —

— ¡Olvídalo! No voy a cocinar tripas de venado —se negó Jennie cruzandose de brazos y Lisa bufara—

— Que delicados son los humanos hoy en día —se quejo en voz baja manteniendo su postura de alimentarse de eso y continuar cortando los pedazos de carne del animal, tranquilamente también se encargo de separar la piel para ponerla a secar y hacer un abrigo para Jennie—

Ni siquiera sabía proque dijo humanos como si ella no fuera una, suponía que era ese efecto de los ungüentos que le ponía Jennie cada momento.

— Me voy a bañar después de esto, así que deberías poner agua para que lo haga aquí afuera y no ensucie tu encantadora casa —

— ¡Entendí eso! —
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— Pon a cocer esta carne —dijo Lisa dándole un poco a Jennie— un estofado para la cena —

— Mejor mañana —Negó Jennie ansiosa, no podía acabarse esa comida, ella ni siquiera la había cazado y aparte solo comía una vez al día—

— Te digo que la pongas a coser ¿o te la vas a comer cruda? —preguntó Lisa alzando la ceja y llevándose una tira de carne a la boca— Sabe bien, pero te daría asco —

— ¡No hagas eso! Primero tu odio a las verduras y luego comes carne cruda, voy a creer que no eres humana —se quejo Jennie—

Aunque dentro de ella sabía que Lisa no era humana, se curó rápidamente, cazaba un venado enorme y aparte no le daba frío cuando ya estaba nevando afuera y la capa de nieve comenzaba a cubrir el césped.

Solo que no sabía que clase de ser era, lógicamente era una criatura mágica, pero no sabía que clase, si era carnívoro podía ser hasta un peligro para ella aunque le parecía agradable en muchas cosas.

— Solo dame eso y bañate cochina —regaño Jennie—

— Igual no creo que ser humano sea tan genial, se están muriendo de frío con una Nevada, débiles —dijo sacándole la lengua a Jennie y comenzar a desnudarse para bañarse— y me dijo cochina, cochina su casa —

— ¡Te estoy escuchando cochina! —