4. La familia siempre llama.

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Krypton, hace mucho...

A Kara particularmente le gustaba estar en su balcón observando las estrellas, era tranquilizante para ella. Siempre estaba sola, ya que su madre estaba como jueza en algún caso y su padre estaba adentrado en sus experimentos. Aunque no niega que en sus pocos tiempos libres lo pasaban con ella. Le gustaba esos momentos, los amaba, pero había día que los extrañaba mucho.

Pero había alguien que nunca la abandonaba. Y ahora ese ser ahora la está abrazando de sorpresa. La rubia sonríe feliz. -Mamá dijo que nunca volverías a visitarme, me alegra que fuera mentira- Kara se quedó abrazada a su tía, que era la mujer que realmente le mostro cariño maternal.

-Bueno, sí me necesitas siempre estaré para ti. Además, me llamaste con esto- señalo la baliza espía que Kara había creado para las dos. Cada una tenía una, que estaban conectadas, cuando la rubia necesitará a su tía tocaría la baliza y la mujer aparecía.

-Mamá me dijo que mataste a algunos Kryptonianos, que eras mala. Yo sé que no es cierto- comentó llorosa. Argo observaba todo desde la pequeña hamaca que Kara le había puesto ahí.

-Oh cariño. A tú tío se le salieron las cosas de las manos, sin querer daño a algunos. Lo hago para que estes a salvo en tu mundo- Kara tembló un poco de frio. La mujer se quitó su capa y se la puso encima a su pequeña sobrina.

-No tuve hijos. Pero Rao me bendijo contigo y te amaré más que nada en mi vida pequeña. Debes saberlo y haría cualquier cosa para ti- se abrazó a la rubia. Un ruido las interrumpió. Alura estaba ahí, con cara muy sería.

-Astra. Por fin nos vemos. Ahora estas atrapada y te mantendrás a las consecuencias a lo que hiciste- Kara apretó más el agarre a su tía al escuchar esto, no quería que la separarán de su tía.

-Así que usaste a tu propia hija para atraparme. Mi querida hermanita, ¿no entiendes que todo lo que hago es por ella?- señaló a la rubia, los soldados tomaron a la pequeña que pataleaba y gritaba. Kara observó como la separaban de su tía. Cada vez las figuras de su madre y su tía se veían más lejanas.

Luego de mucho tiempo, su tía nunca volvió, aunque Kara apretará el botón de la baliza espía una y otra vez. Y por primera vez en su vida se sintió sola realmente. Guardo la baliza en su bolsillo y abrazó lo único que Astra le había dejado, la capa, pensaba que tal vez algún día la volvería a encontrar.

Actualidad.

Lena monitoreaba a Kara cada quince minutos, observando cómo iba avanzando su proceso de curación. El teléfono de la pelinegra sonó y ella respondió -Luthor-

-Lena. Sólo hablaba para avisarles que Hank fue secuestrado por Non. ¿En cuánto despierte Kara puedes traerla? Es la única que puede sacarle información a Astra- escucho por el teléfono a Alex. No sabía si fuera buena idea, pero trataría de llevar a la rubia a la DEO.

-En cuanto despierte le preguntaré si desea ir. Nos vemos Alex- suspiró cansada Lena, había sido una larga noche. Sintió que Sam le apretaba el hombro.

-Ve a descansar Luthor. Por cierto, Ruby está durmiendo en una de las literas en el cuarto de descanso. Yo monitoreó a Kara. Después de todo es mi familia- sonrió amablemente. Lena asintió y fue a la sala de descanso, donde su sobrina dormía profundamente, se quitó los tacones y se acostó en la litera desocupada. Junto a ella se acostó Oísin.

Lena & Supergirl. Una historia pokémon.Where stories live. Discover now