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Chapter 17

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Conocer oficialmente a Baoshan Sanren... fue incómodo para Wei Wuxian.

La inmortal parecía haber dejado de envejecer a los veinte años. Lo único inusual en su apariencia, en comparación con otras jóvenes doncellas mortales, era su largo cabello gris claro. El innegable aura poderosa y la mirada sabia en los ojos también indicaron años de experiencia.

Wei Wuxian vio destellos de ella durante la pelea y durante la reunión informal anoche, pero no se presentaron el uno al otro.

Ahora que él y Lan Zhan estaban sentados frente a ella y Xiao Xingchen, no sabía cómo actuar frente a la mujer que era prácticamente la madre adoptiva de su madre.

―Tienes sus ojos plateados y su sonrisa― dijo Baoshan Sanren en voz baja. Xiao Xingchen sonrió ampliamente a su lado.

―Mi madre...― tiene muchas preguntas pero no sabe si podría preguntar. Lan Zhan apretó su mano en apoyo.

―Cangse Sanren dejó esto al pie de mi montaña celestial. Lo encontré cuando regresaba de una cacería nocturna donde adopté a Xingchen― Baoshan Sanren sacó un pergamino de su manga. Lo empujó frente a Wei Wuxian.

Abrió el pergamino y se sorprendió al ver un retrato familiar.

Una hermosa mujer estaba sentada en un taburete, con un bebé en brazos. Sonrió ampliamente, mirando directamente al pintor, mientras un hombre alto que estaba de pie junto a su taburete, la miraba con calidez y amor.

En la parte inferior del pergamino estaba la firma simple del pintor, solo un carácter bellamente escrito para "Nie".

―Wei Ying― Lan Zhan llamó su atención. Su alma gemela señaló algo escrito en la parte posterior del pergamino.

"Maestro, desearía que algún día conociera a mis amados Changze y A-Ying. Te echo de menos."

―¿Esto es...?― Wei Wuxian sintió que algunas lágrimas fluían de sus ojos.

―Tu familia, cuando aún eras un recién nacido.― asintió Baoshan Sanren. ―Me disculpo, Wei Wuxian... En mi montaña, mis discípulos y yo vivimos en silencio, sin preocuparnos por el mundo de los mortales. Cuando supe que tu madre murió, Jiang Fengmian ya te había llevado a Yunmeng... y desafortunadamente, supe que moriste solo cuando Taizi Dianxia me visitó...

―¿Conoces personalmente a Taizi Dianxia?― sus ojos se abrieron con sorpresa.

―Xie-daozhang es nuestro Maestro.

Él asintió mientras reflexionaba sobre la información del Maestro de su madre. Así que técnicamente... ¿Taizi Dianxia es su bisabuelo marcial? Ese pensamiento tonto lo hizo sonreír.

Continuó escaneando el retrato familiar. Su madre también tenía ojos plateados... y su padre, tenía la misma estatura, la misma forma de cara... Wei Wuxian es la combinación perfecta de los atributos físicos de sus padres.

―Estoy muy contento de haberte conocido, Wei WuXian.―sonrió Xiao Xingchen. ―Te busqué después de dejar la montaña del Maestro, pero ya habías muertpo para entonces.

―Me alegro de conocerte también.

Después de un momento de tranquilidad en el que solo bebieron el té que sirvió Xiao Xingchen, finalmente enrolló el pergamino y se lo devolvió a Baoshan Sanren.

La Maestra negó con la cabeza y dijo: ―Puedes quedártelo. Lo traje para dártelo.

―Yo...― se puso de pie y saludó con respeto. ―¡Muchas gracias!