Escenarios 2 (Eren Jaeger X Lectora)

Buscando a (...)

El celular no dejaba de vibrar, era incómodo y molesto. Mikasa le decía a su recién esposo que lo ignorara mientras sus besos se escapaban en la boca de Jaeger.

—¡Rayos!—Habló Eren muy molesto. ¿Qué quiere Zeke a estas horas?

Y era lógica su molestia. Era su primera noche de Luna de miel, estaba a punto de ser el primer hombre en entrar en su reciente mujer.

—Ignóralo, sigue besándome.

Pero  no se detenía. Eren tomó el celular sintiendo el impulso de romperlo, se detuvo un segundo y mostrando molestia le respondió muy brusco:—¡¿Qué diablos quieres hermano?!

—También te quiero, hermanito.

—¡No estoy para bromas! ¡Acabas de interrumpir un momento muy íntimo!

—Eren, ¿Mikasa está ahí?

—¡Claro que está aquí! ¡No vuelvas a interrumpir!

—No te atrevas a colgar—Lo interrumpió—Sal de inmediato de la habitación, Eren Jaeger...estás metido en un gran problema.

Con esas palabras lo convenció.

—¿Pasa algo malo?—-Dijo Mikasa desde la cama.

—No, tranquila. Vuelvo en un momento.

Tal como le pidió su hermano,  Eren salió del cuarto donde pasaría noches matrimoniales con su reciente esposa, se alejó lo suficiente, caminó hasta las afueras de aquella cabaña y cuando estaba lo suficientemente apartado contestó.

—¿Qué problema? ¿De qué estás hablando?

—Tu matrimonio con Mikasa no es válido.

—¡¿Ah?! Déjate de bromas.

—Eren—Suspiró desde su celular—Me acaba de llamar la jueza que los casó. El matrimonio es inválido porque tú ya estás casado con alguien más.

La cara que puso fue una de amargura. Estalló una carcajada y quiso colgar, pero Zeke no bromeaba, hablaba muy enserio. Le mandó una foto a su celular que confirmaba lo antes dicho por Zeke, al parecer Eren se había casado hace algunas semanas con una tal (...) (...).

Era imposible de creer, los primeros pensamientos de Eren  eran de una incapacidad por creerlo, debían de haber falsificado su firma, alguien se hacía pasar por él, era un absoluto error, tal cosa era imposible. Eren no conocía a ninguna (...), era completamente imposible que él se hubiera casado con alguien más que no fuera su reciente esposa Mikasa.

—Eren, la semana de despedida de soltero que pasaste en las Vegas. ¿La recuerdas?

—¿Ah?

El corazón de Eren palpitó asustado. No podía recordar bien aquella semana, y eso le infundía un mayor temor.

Y ahí estaba la hipótesis de su listo hermano mayor: Eren se había ido a pasar una semana de despedida de soltero en Las vegas, quizás conoció a una chica llamada (...) y se había casado con ella, debió estar muy borracho, y eso fue lo que pasó.

—¡No No!—Habló Eren colocando su mano en la frente por un repentino dolor de cabeza—Armin estaba ahí, no creo que él me haya dejado cometer ninguna estupidez. ¿Cómo carajos me voy a casar en una noche?

— Casarse sólo implica firmar un papel en presencia de testigos. Llama a Armin, debemos arreglar este lío.

—No le digas nada a Mikasa, voy a arreglar esto por mi cuenta, ¿Está claro?

—Está bien.

Al volver al cuarto Mikasa lo estaba esperando preocupada.

—¿Seguro  que todo está bien?