39

279 24 51
                                    

El tiempo comenzó a pasar muy rápido

Ups! Gambar ini tidak mengikuti Pedoman Konten kami. Untuk melanjutkan publikasi, hapuslah gambar ini atau unggah gambar lain.

El tiempo comenzó a pasar muy rápido. Estar concentrada solo en mis estudios, era bueno. No... tenía oportunidad de pensar en Pearce todo el día.
Él aún trataba de hablar conmigo, solo que no de la misma forma que antes. Me solía escribir dos veces al día. En el mismo horario en que teníamos nuestras llamadas antes. Pero no más.
Agradecía eso. Así ya no me sentía presionada por sus constantes mensajes.

Sí lo extrañaba, pero... cada que quería hablar con él, comenzaban mis inicios de crisis. Eso me hacía no llamarlo, y terminar en mi mundo.

Últimamente tenía pequeños shutdown todos los días. Al menos no me duraban mucho.

Estaba de regreso a casa, luego de otro día de universidad. Luego sacaría a pasear a Jolt, antes de avanzar tareas.

Entré en casa, como todos los días, pero Jolt no vino a mi. Siempre pasaba. Cada día. Yo abría la puerta, y me encontraba a Jolt ahí.

- ¿Qué tal todo? -me preguntó mamá desde la cocina.

- Bien... ¿Dónde está Jolt? -pregunté rápidamente.

- Supongo que no te escuchó llegar. Está en el jardín. -estaba por ir, pero ella me detuvo.- Lexi, tranquila, ¿sí? Él está bien.

- Él está justo aquí. -rápidamente me giré y... Pearce estaba ahí. Jolt estaba... viniendo hacia mi... con Pearce.

Yo... Él...

- ¿Qué... qué haces aquí? -pregunté tratando de calmarme. Esto... No sabía como reaccionar.

- Tengo unas semanas libres, así que quise venir a verte. Perdón por entretenerlo. No lo veía hace mucho. Está muy grande.

Eso era cierto. Ya no era un cachorrito. Ya ni siquiera podía cargarlo.

No sabía que contestar. No sabía que decirle, en realidad. No esperaba verlo aquí.

- Tengo que ir a recoger a Dylan, así que los dejaré para que hablen. Siéntete como en casa, Pearce. -dijo mi mamá, antes de tomar su chaqueta e irse.

- Te extrañé. -me dijo mientras intentaba acercarse a mi. Solo en ese momento reaccioné y corrí hasta mi habitación.- ¡Lexi! -él no tardó mucho en seguirme, pero cuando estaba por atraparme, cerré la puerta de mi habitación, dejándolo afuera.- Lexi, déjame entrar. -dijo mientras trataba de empujar la puerta, pero yo hacía lo mismo desde el otro lado.- Por favor. Tenemos que hablar y lo sabes. -estuvimos un buen rato así, hasta que se cansó. Dejó de tratar de entrar, y solo siguió hablando.- Creí que... te gustaría la sorpresa. Como cuando tú fuiste a verme en la semana de mi cumpleaños. -no dije nada. Así que él siguió hablando.- No quise hablarte así, en serio. Es solo que... todo es complicado y no lo entiendo. No sé si lo que hice, mientras estaba aquí, estaba bien, o si hice algo que te pusiera en riesgo. Yo solo... quiero que estés bien. -respiré profundo, antes de abrir la puerta lentamente. Él me miró, pero to no pude hacer lo mismo.- ¿Ya te puedo abrazar? -dudé un poco, pero lentamente levanté mi mano en su dirección. Dos segundos después, él estaba abrazándome con fuerza.- Te extrañé mucho.

Cuéntales - Pearce Joza y túTempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang