3. Gaslighting.

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Hi~ Es demasiado temprano para actualizar, i know, pero no tengo certeza de cómo ira mi tarde, así que lo subo a esta hora no más. Desde acá creo que el fic se vuelve más largo, no fue si ocurrió consciente o inconscientemente al tener menos promps, pero se me alargaron un poco los capítulos, la relación entre Ash y Eiji diría que va rapida, pero al mismo tiempo se siente bien justo por el largo de esto, so don't know, espero que salga algo decente.

¡Muchas gracias a quienes se tomaron el cariño para leer!

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Clic.

—¿Qué haces? —La suave carcajada de Eiji anega el estudio de fotografía, el aroma de los químicos entremezclado con la tenue reminiscencia de Nueva York le han inundado los pulmones, su mirada abandona el alfeizar de la ventana para posarse en el lente de la cámara, viejo, gastado, de bordes amortiguados y repletos de abolladuras pero aun así, capaz de desprender flashes cegadores.

—Te estoy sacando una fotografía. —Proclama con orgullo, dándole una sonrisa de muchos dientes alegre e infantil.

—¿Por qué?

—Te veías muy lindo. —Sing musita, contemplando con orgullo la miniatura en la pantalla, tiene una expresión núbil que solo se intensifica con el sutil sonrojo que salpica sus mejillas—. Deberías ser mi modelo. —Suelta con voz cantarina, tentado a elevar otra vez la cámara, no se atreve, la correa de alguna manera se siente demasiado pesada contra su cuello en una advertencia.

—Si quieres tener éxito en esto deberás tener modelos reales. —Se burla, mirando la escarcha que ha cristalizado la ventana una última vez, observa cómo recubre las plantas de enfrente y teme.

—Tú puedes ser un modelo real. —Insiste—. Eres bastante guapo.

—Sing.

—Me gusta tomarte fotos a ti. —Musita, bajando la mirada a las imágenes recién reveladas—. Y me gusta mirar tus fotografías.

—Ibe-san es un buen instructor. —Eiji intenta desviar el tema, es experto en el arte del escamoteo y saca a relucir sus talentos—. También es tu maestro ¿no?

—Es diferente. —Pero no funciona con Sing—. La clase de mundo que plasmas en tus imágenes es... —El muchacho frunce la boca y mira el techo con suma concentración, como si pudiese encontrar una respuesta entre las mugrientas grietas blancas que la humedad ha dejado—. Impactante.

—¿Impactante? —Esa no es la palabra que él habría usado.

—¡Sí! ¡Sí! —Sing salta emocionado—. Aunque escoges paisajes o modelos sumamente crudos, dan la impresión de ser atesorados con compasión e incluso con ternura, creo que eso es muy admirable. —Sus pulmones se contraen dolorosamente dentro de su pecho, suben y bajan, el oxígeno se torna pesado, puede percibir los pétalos brotándole en la tráquea, clavando sus espinas entre sus cuerdas vocales con ferocidad, haciéndolo sangrar en silencio—. Te admiro bastante.

Send me roses  [Angstruary]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora