"V"

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El frío de la noche hacía ver el ambiente húmedo, las pocas nubes que habían eran blancas y se veían muy suaves.

Esos pies torpes del ruloso, todo temblaba, pero por alguna razón se sentía seguro por el ojiazul que agarraba su mentón con firmeza, sus respiraciones estaban tan cerca, podía oler el aroma a limón brotar de la piel de Louis; unas pequeñas mariposas empezaron a volar adentro del estómago de Harry.

La verdad, quién no se pone nervioso en este momento?

Louis sentía esa gran necesidad de sentir los delgados, pero rosados labios del rizado, apenas lo vio, supo que algo pasaba, algo cambió en él, una de las primeras cosas que se dio cuenta es que ver llorar a Harry era más doloroso que te tiren un balazo, verlo sufrir hacía que Louis sintiera impotencia, al principio no sabía el porque, pero cree que ahora ya lo sabe.

Tal vez.

Harry odiaba a Louis, es un ser muy frío, pero, veía esos hermosos ojos azules y como algo de él le atraía, aparte del físico, Louis tiene... no sabe que tiene, pero lo tiene.

Ellos sentían algo, no saben que, porque nunca lo sintieron... Louis nunca supo que es amor, sólo sabe que es el amor de madre, pero ya no más, y Harry sólo sabe que es amor de familia, pero nunca supo que era enamorarse...

¿Se estaba enamorando?

En este caso, Harry parece un poco mayor que Louis por su tamaño, pero en realidad Louis tiene 18 y en cambio, Harry tiene 16, pero deben estar juntos.

-¿A-a mi?- Preguntó Harry, no creía lo que dijo Louis.

Oh vamos, ni yo lo creería.

-Escúchame Harry, no sé que mierda me pasa, pero sólo sé que necesito sentir tus labios.- Respondió Louis sin saber que para Harry esto es nuevo, el ojiverde nunca había besado en los labios a nadie.

-¿A-a que te refieres?- Preguntó Harry.

Louis estaba a punto de pegar sus labios contra los de Harry, pero al escuchar esa pregunta frunció el ceño y sin separarse miró a Harry. -Eres un idiota... pero maldición, amo tu inocencia.

Harry quiso entender, pero se olvido de todo cuando sintió los labios delgados de Louis contra los suyos.

El ojiverde cerró sus ojos y se dejó llevar, no estaba seguro sobre lo que tenía que hacer, pero dejaba que Louis haga todo, Louis soltó el mentón de Harry y colocó sus manos en su cintura, lo sentía tan delgado y frágil, tenía miedo de romperlo.

Las manos torpes de Harry no sabían que hacer, pero dejó que su cuerpo se mandara solo y sus manos se colocaron en el cuello de Louis.

-No hagas eso basurita.- Dijo Louis entre besos y acercando más a Harry a su cuerpo. El ojiverde quitó sus manos rápido y no supo que hacer con ellas, pero lo que sabía era que no quería despegar sus labios de Louis. 

-¿Donde pongo mis manos Louis?- Preguntó Harry sin dejar de besar los lindos labios del ojiazul. 

Louis se puso a reír sin soltar los labios de Harry y dándole un pequeño mordisco al labio inferior del ojiverde, haciendo que se quejara. 

-Auch, eso si no me gusto.- Dijo Harry cortando el beso.

-No me interesa basurita rizada.- Dijo Louis volviendo a morder los labios de Harry y besándolo hasta quedarse sin aire.

Ese gran beso duró mucho tiempo, que Harry ni se dio cuenta que ya eran más de la medianoche, pero eso ahora no era lo importante.

Cuando Harry se separó para respirar miró el cielo azul en los ojos de Louis. -Basta, esto está mal.

1864Donde viven las historias. Descúbrelo ahora