¿Mi mate? ¿Alpha? [Terminado/Sin Editar]

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[Ethan]

—¿Otra guerra?—

—No lo sé, pero, todo se está descontrolando, ¡Los ataques de Rogers unidos con los vampiros! Ahora, los humanos lograron ver un lobo, que lo más lógico, es que si lo llegan atrapar, estamos jodidos, porque se darían cuenta de nuestra entidad— 

—Temes que haya otra guerra, los humanos contra nosotros—

—Si— me levanto, para ver por la ventana.

Observo como mi gente vive tranquilamente, en paz sin temor que seamos atacados, hemos vivido bien, por largos años, eso gracias a la Diosa Luna,que bajo para ayudarnos.

Cómo Alpha de la Manada Yellow Forest, es mi deber como líder, cuidar del bienestar de mi pueblo, tengo prácticamente la vida de todos en mis manos.

Puede que nosotros no contemos con armas, bombas, cohetes, y esas cosas para poder defendernos, porque contamos con algo mucho mejor.

Nosotros a diferencia de los humanos, sabemos lo que es apoyar y respetar, al mismo ser que es como uno.

Lobos con lobos, Vampiros con Vampiros, Demonios con Demonios, Hadas con Hadas, Brujos con Brujos, Ogros con Ogros, y así sustantivamente. No importa los problemas que tengamos. Siempre nos apoyaremos.

Recuerdo muy bien la historia que me contaron, de como fue la guerra de personas contra nosotros. Todas la especies de seres nos unimos para poder defender nuestro honor.

No entiendo cómo dicen que nosotros somos seres peligrosos y monstruosos. Y al contrario, ellos mismos son lo que tanto ladran que somos. El ser humano es una especie de ser egoísta, ambiciosos, que solo desean poder, como el dinero y tierras. Mandar donde quieran que estar.

El día de ayer mandé una carta al concejo, sobre lo que pienso y que se preparen para lo que puede venir. Para el día que la Diosa Luna, baje.

—Orden a los guardias que necesito que no solo vigilen alrededor de la manada, también el terreno. Todo, aseguren que lo refugios estén bien protegidos, sin olvidar colocar la seguridad que ordene para el pueblo—

—Enseguida Ethan— los escucho salir del despacho.

Maldición, tenía que pasar esto, cuando por fin después de tanto tiempo pude encontrarla, por supuesto que no permitiré que arruinen mi felicidad.

Necesito lo antes posible a Samantha aquí, siento que teniéndola, acá, estaré mucho más tranquilo.

~¡Secuestremosla!~

—¿Acaso quiere su odio?—

~Bueno no, su odio no, si no, su amor y cariño~

—Entonces cállate, que tus ideas no me sirven—

~¡Pero que genio! Si se ve que te hace falta esos dichosos mañaneros~

—Y lo dice el que solo era un amargado, que solo pensaba en  asesinar y esas cosas—

~Eso fue en mis tiempos que está solo, pero ahora con mi Sam, no~

—Cuando vea a Sam, le diré que te domestique—

~¡Que no soy un perro! ¡Soy un lobo gigante muy aterrador!~ queja enojado mientras gruñe.

Sonrió burlonamente.

—Eso no decías cuando Sam, jugo contigo con la rama esa —

~Solo ella me puede mandar, para eso es mi Luna~