°notre promesse ° (Regulus Black y tú)

capitulo 27.

Chocolate
con olor a...

Narra:___

Después de que el tema sobre la fiesta de Lily se calmara y todo lo que pasó después, toda la escuela estaba ansiosa por el 14 de febrero y esas cosas de regalar dulces, cartas y flores.

Pero en mi caso, lo único que me mantenía ansiosa era la información que la profesora de Adivinación me dijo y ahora tenía miedo de dormir, así que en ves de eso ocupaba las noches para hacer las tareas y me mantenía despierta con grandes tasas de café negó.

Y a veces cuando no tenía nada mejor que hacer, subía, como siempre a la torre de astronomía, donde veía las estrellas o en ocasiones platicaba con Regulus. Claro solo si el estaba ahí.

Solo an sido dos veces, no es para tanto..

Aún así era muy fácil pasar el tiempo con el, ya sea ver las estrellas o platicar de lo que sea.

Cómo ahora, que solo nos dedicamos a apreciar las estrellas y sentir el viento en nuestros rostros.

Giré mi cabeza para preguntarle algo, pero el ya me estaba mirando.

—¿Por qué "príncipe de Slytherin"?—le pregunté sonriendo.

—Bueno, por qué cuando era un niño pequeño, Bella siempre me decía que cuando entrara a Slytherin sería el mejor de mi casa y que "príncipe" sería algo así como algo que me gane por mi esfuerzo y esas cosas.— vaciló al final de responder.

Había estado muy distraída como para notar que no llevaba pijama, ni el uniforme, ni mucho menos, algo cómodo, en lugar de eso llevaba puesto un pantalón formal y una camisa blanca. Claro que se veía bien, como siempre pero ¿Por qué vestirse así para la madrugada?

—¿Y eres el mejor de todas tus clases?

—No de todas, en herbologia soy el segundo.— me dijo con una sonrisa y un tono un tanto egocéntrico.

—Me sorprende que quedes en segundo lugar en algo.— confesé con burla.

El se rió en silencio y volvió su vista a las estrellas, pero yo no, yo solo veía como estás se reflejaban en sus ojos y puede que también viera como se abrían y cerraban sus fosas nasales cada que respiraba, y... Sus pecas que me recordaban a el café.

—¿Vas a seguir viendo las estrellas o prefieres que te regale una foto de mi?

—Je pourrais aussi bien voir les étoiles dans tes yeux.—(bien podría ver las estrellas en tus ojos) pronuncie sin darme cuenta, pero afortunadamente en francés.

EL TAMBIÉN SABE FRANCES.

—Digo... Que prefiero ver las estrellas antes que verte a ti. Nunca tendrías tanta suerte.— dije como manera de defensa.

—Mejor dime cuándo es tu cumpleaños para enviarte mi foto. Serás muy afortunada.

—Tienes suerte de que cruze palabra contigo.— me sentí como una diva al decir esas palabras.

—Suerte la tuya, de que me se tu nombre.

Así que vamos a jugar a "mi casa es más grande que la tuya" ehh.