Lovesick Girl

Adicción

BOMBA. EXPLOTÓ MI CASA POR CULPA DE USTEDES, VICIOSOS. Grita si te gustó el capítulo anterior y envíame tus teorías retorcidas sobre el próximo capítulo y que deseas que suceda. Muy contenta escribiré más para vosotros, almas sucias, y una cosa, si lees esto en público, es decir, en un parque, un autobús o estás rodeado de personas, no te rías alto, lo digo por experiencia propia. Sería una vergüenza total y una muerte segura para mí. Éste capítulo promete tener cosas mejores y todo irá con más tensión. Una pequeña pregunta, ¿os habéis fugado alguna vez del instituto? Bueno, si dices no, aprenderás lo bueno de hacerlo y si dices que sí, te aconsejo que sigas haciéndolo, es genial. Tan bocazas como siempre; ¡dije la idea principal! Como siempre, espero que me den su estrella y me cuenten sus teorías retorcidas. Los amo, chic@s.

Astrid Evans:

Idiota. Odio a los idiotas engreídos como él. Me siento en mi cama toda molesta y pongo música para intentar evitar que me enfurezca más y lo mate. La canción Love Me Again de RAYE suena por toda mi habitación y Verónica y Jess entran a mi habitación asomando la cabeza por la puerta mientras cantan conmigo el estribillo de la canción.

-Venga, ámame otra vez... ¿Y a qué o quién se debe ésa cara larga? -Pregunta Verónica con una sonrisa. Yo la imito mordiendo mi labio inferior, dudosa. No sé si contarles lo sucedido en casa del bruto idiota de Ian Winbrook. Lo odio con toda mi alma.

-Sí y creo es un quién. -Dice Jess sacándome la lengua. Yo sonrío mordiendo mi labio y sólo asiento en respuesta.

-¿Así que el idiota de Ian Winbrook te dejo ésta mala cara? -Pregunta Verónica pero sé que no es una pregunta.

-Entonces, ¿qué dicen de irnos de fiesta? -Dice Jess con alegría. Yo no tenía ganas de salir de casa pero a Jessica Young no se le puede negar nada. Igual a Beck. Recordarla me hace echarle más de menos.

-Yo no quiero salir. -Digo excusándome.

-No acepto tu respuesta, Srita Evans. -Dice Verónica y Jess tira de mí para llevarme al clóset en busca de algo que ponerme.

-¿En serio? Ver éste clóset da repelús. -Dice Jess y cierra el clóset con fuerza.

-¡Hey!

-Vero, vamos a ver si tienes algo provocativo para ésta adolescente que parece una monja. -Exagera Jess y se va con Verónica. Sí que está loca ésa pelirroja, es peor que Beck.

En eso sí que es igual a Beck, si vieraís lo que ésa loca pelirroja me trajo es para matarla. Un vestido color rojo corto de escote provocativo y toda la espalda descubierta. Ahora sí que la mato, agarrenme que la mato.

-Ahora vete y ducháte. Nos quedan pocos minutos y Álex vendrá a buscarnos. -Dice y me empuja en dirección al baño. Te mato, Jessica Young, corre antes de que te mate. Me ducho y apenas al sentir el agua resbalar mi cuerpo, recuerdo a Ian tocándome.

¿Por qué? ¿Por qué yo? Me pregunto y no tengo respuesta. Odio que ése idiota ponga su mirada en mí. No entiendo qué le hice para que sea tan idiota conmigo. ¡Ni siquiera le miro! Basta de torturarte, Astrid. Ya no te prestaré atención.

Salgo del baño en toalla y apenas salgo huelo a nicotina. Álex y sus vicios. Me sujeto bien la toalla y me doy la vuelta al balcón. Ian Winbrook vestido formalmente de traje negro y fumando en mi balcón mientras me mira, deseando que se me caiga la toalla. Tomo el gas pimienta de mi mochila y él ríe. Me abalanzo sobre él pero cuando voy a rociarle el gas, ni siquiera funciona. Ahora sí que la cagaste bien cagada, Astrid Evans.