𝐁𝐄𝐋𝐈𝐄𝐕𝐈𝐍𝐆; Theodore Nott ✓ [2]

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« SIRIUS BLACK ESTÁ AQUÍ »

Si algo que Helena Weasley era fanática o muy reconocida, era por insultar y llegar tarde a las clases.

Todos le habían dicho a Helena que el profesor Lupin era muy bueno en el trabajo como profesor, a la pelirroja le emocionaba tener su primera clase con él, pero el destino estaba en su contra, como toda su vida, se había tropezado con un Ravenclaw, y no pudo evitar insultar.

Al llegar al salón de DCAO, no había nadie, pero había un pergamino en el suelo, era la letra de su amiga Gryffindor, Hermione Granger era su salvación.

L.W:

Sala de profesores, y ven rápido. No insultes a nadie.
H.G

Weasley besa el pergamino. Sale del salón y se dirige a la sala de profesores.

Queriendo entrar silenciosa, la puerta emite un chillido llamando la atención de toda la clase, incluso del profesor Lupin.

Sonríe inocente — Perdón. Puede continuar. — dice moviendo su mano.

— ¿Puedo saber el motivo de su retraso señorita...? — ladea la cabeza confundo.

— Weasley, Helena Weasley. Y tengo un motivo muy grande, pero sería tan grande que probablemente demore y terminé su clase. Así que puede seguir sus clases. — dice Helena sonriendo orgullosa.

Algunos de sus compañeros la miraron de forma confusa.

Lupin sabía dónde había visto esa sonrisa. Estaba seguro, pero ¿Era de él? Y ese sarcasmo lo había oído en Hogwarts, junto con ella. Su amiga nunca le dijo nada.

La pelirroja se acomoda en medio de la Granger y Leo Black.

— ¡Llegaste tarde! —murmura la castaña.

El Black emite un sonido haciendo que se callen.

— Como si tú no quisieras saber — dice Weasley empujando su hombro del Black. — Gracias Mimi por la notita, si no fuera por ti me hubiera perdido esto.

— Bueno después de la interrupción de la Señorita Weasley — el profesor le da una mirada a la pelirroja que hacía como que no miraba al profesor — Bien Neville ¿Qué es lo que más temes?

— Al profesor Snape.

Helena le daba la razón, no es que tuviera miedo al pelo de grasa, si no que siempre se metían con los Longbottom y eso no le gustaba a Helena y Leo.