Carta 2: 11-20

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Querida señorita Dupain

Es tan fácil hacerte sucumbir que debería ser pescado ni siquiera intentarlo ¿Si tanto quieres que te bese ¿Por qué no sólo lo pides y ya? Si tanto quieres que nos devoremos ¿Por qué no sólo lo hacemos y ya?

Y es que no lo puedo ocultar, cada que él te arranca sonrisas, quisiera ser yo el que esté ahí, porque cuando estoy a tu lado luces tan molesta y tensa.  Cada faceta de ti es una joya digna de apreciar, pero siempre he querido lo que no puedo tener, es mi mayor defecto, entonces no pude evitar desear ser yo quien te hiciera feliz.

Pero por razones que no termino de comprender, al momento en el que has tenido que elegir entre él y yo, me has elegido a mí ¿Cómo quieres que me detenga cuando provocas un incendio forestal en mí?

Eres lo único que me hace consciente de que mi corazón aún late. Te agradezco por eso, por hacerme dar cuenta que no he muerto.

Infect me // FelinetteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora