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Los largos pasillos, casilleros rojos, estantes con medallas de todas las competencias que se realizaban en la universidad, y gente de todas las edades caminando por el lugar, era algo completamente nuevo para Park Jisung.

Sería una completa mentira decir que no se encontraba nervioso y temía equivocarse. Porque sí, estaba que temblaba y podría salir huyendo del recinto si no fuese porque Chenle lo estaba sujetando de un brazo y Jaemin del otro, como si supiesen exactamente de lo que Jisung es capaz cuando sus emociones lo rebasan. No los culpa tampoco, pues ya había mencionado querer correr a su casa y esconderse bajo las sábanas.

Ellos solo intentaban que su primer día en la universidad fuese agradable.

Aunque, hasta el momento, no podía mencionar nada bueno que le haya sucedido. Su mañana iba en picada.

Su madre, Park Sooyoung, lo despertó muchísimo más temprano de lo planeado con la excusa de que así no tendría que andar apurado a última hora. Quizá, probablemente, ella tenía un punto, pero de igual manera cree que fue un poquitín exagerada. Eso fue lo primero, luego estaba Chenle que llegó a su casa haciendo un escándalo, gritando de allá para acá y apresurando su andar, al igual que su madre. Todo el tiempo piensa en que ambos son muy similares y son la razón por la que Jisung tenía sus emociones a flor de piel ese día.

Le gustaría ser como Chenle, porque también es su primer día y en una carrera que no solo se lleva toda la estabilidad y tiempo libre, sino también todo lo demás. No obstante, Zhong Chenle ni siquiera lucía un poco afectado. Su sonrisa iluminaba el maldito pasillo y más de una persona se giró a verlo, Jisung quería pensar que se debía a la seguridad que poseía y no por otras razones. Muchísimo tenía en su cabeza como para preocuparse de los tontos que veían a su novio con otros ojos.

─Vas a estar bien ─Jaemin le dijo cuando ya habían llegado a su aula. Su primera clase del día.

─No sé, no podría estar muy seguro de eso...

Chenle hizo un gesto con la mano, señalando que Jisung ya estaba diciendo cosas que no eran y que lo mejor que podían hacer en una situación como esa es ignorarlo.

─Ya te dije que vas a ser el mejor de tu clase. El talento no se puede ocultar, ¿sabías eso?

─Solo lo dices porque eres mi novio ─murmuró.

─Yo no soy tu novio y también te lo estoy diciendo ─Jaemin agregó─. De hecho, ahora mismo, él debería estar esperándome... ─dio un rápido recorrido con la mirada por el lugar, dando finalmente con Lee Jeno a unos metros de distancia, hablando de manera animada con sus compañeros de carrera.

Se veía realmente guapo, y no lo decía porque se tratara de Jeno, sino porque en serio lo es y ese día parecía haberse levantado mejor que nunca. El cabello negro brillaba desde la distancia, su sonrisa era sincera y muy linda, Jaemin sintió cosquillas en el estómago cuando Jeno cambió la dirección de su mirada de sus compañeros hacia él, le dedicó un leve guiño y metió las manos en sus pantalones. Sí, definitivamente lo estaba esperando.

─Me tengo que ir. ¡Nos buscas en tu tiempo libre! ─y Jaemin se alejó, moviendo su mano de un lado a otro.

Jisung volvió a mirar a Chenle, descubriendo que él no le había apartado la mirada de encima en todo ese tiempo.

─Te ves lindo así ─le dijo con voz baja, mientras intentaba aguantar una sonrisa─. Me gusta esa chaqueta, deberías ponertela más seguido.

─¿Hace cuánto que querías decir eso?

─Muchísimo ─rió─, pero Jaemin iba a molestarme si me oía.

Jisung se permitió relajarse y soltó una carcajada junto a la suave risita de Chenle.

Stray BabiesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora