En las tardes de un verano

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10 de agosto del 2021

Elisa: Se van a divorciar

Fer: Yo si fuera su esposa ya le hubiera pedido el divorcio 

Ari: Creo que le fue infiel con la maestra de filosofía 

Elisa: No es sorpresa de que le sea infiel con la primera mujer que se tope

—Señoritas Elisa, Fernanda y Ariadna —escucho que habla el profesor de idioma y al instante apago mi celular y levanto mi cabeza para verlo—, si quieren estar en su celular pueden salir de mi clase, pero ya no pueden regresar 

—Perdón —digo 

Él solo suspira y vuelve su vista a su celular. 

No sabia porque se enoja de que estemos en el celular cuando claramente él esta haciendo lo mismo, solo esta sentado en la silla enfrente de su escritorio, en el pizarrón solo hay una actividad de completar el texto, pero eso lo termine rápido y aun falta una hora para que la clase termine. 

Estaba platicando con mis amigas porque creemos que esta de mal humor porque su esposa le pidió el divorcio y tiene razón Fernanda, ese viejo se lo merece. Sentí como mi celular vibró y cuidadosamente sin que el profesor se diera cuenta, lo saqué y al prenderlo noté que era mensaje del grupo de mis amigas.

Fer: ¿Qué van a hacer hoy?

Ari: Tarea para no reprobar

Elisa: Yo quiero ir a la playa, ¿Alguien me acompaña?

Fer: No puedo, voy a salir con mis papás

Ari: Y yo tengo tarea, perdón Eli :(

Elisa: No importa

Ari: Invita a Elías, talvez él si valla

Volteo a ver a mi amiga que esta del otro lado del salón y ella solo me guiña el ojo, pero yo niego con la cabeza. Aunque no era tan mala idea, no quería ir sola a la playa y creo que Elías podría aceptar ir conmigo.

Seguí hablando un rato más hasta que el profesor nos dijo que ya nos podíamos ir así que no dude más y salí con mis amigas de el salón.

Las tres fuimos a comer algo y después nos fuimos a la salida donde nos separamos y cada quien se fue a dónde tenía que ir. En mi caso, mi mamá me había escrito para decirme que pasará a comprar unas cosas, entonces tenía que ir a comprarlas e ir a casa.

La plaza no estaba muy lejos de la escuela, pero aún así me tardé casi medía hora en ir y otra medía hora comprando las cosas.

Llegando a la casa, fui a la cocina dónde le di las cosas a mi mamá y poco después me subí a mi cuarto para limpiarlo un poco, igual le mandé mensaje a Elías diciéndole que si quería ir a la playa y me dijo que si, así que me tenía que apurar para poder ver el atardecer.

Convencer a mi mamá para que me dejará salir no fue tan fácil ya que se supone que aún estaba castigada y también se supone que debería estar en la heladería, pero hoy no quise ir.

Al terminar de limpiar mi cuarto, agarré una bolsa de tela donde puse una toalla no tan grande y demás cosas que tal vez ocuparía.

Me puse un bikini café que era tejido a mano lo cuál me gustaba mucho, arriba de este bikini me puse una playera ancha verde y unos shorts grises con mis sandalias altas de un color entre verde y café.

Por suerte cuando bajé mi papá no estaba aún, así que solo me despedí de mi mamá y me fui antes de que me preguntará algo más.

Caminar me gustaba demasiado y más cuando voy a un parque en el cual siempre hay niños, me gusta su forma de ser, como ven la vida inocentemente con sueños que anhelan cumplir y creo que por eso me gustaría ser maestra, para seguir motivándolos.