♥️15-FINAL♥️

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Wang Yibo caminaba de un lado a otro preocupado por el Omega aún dormido, habían pasado ya nueve horas y el azabache no daba señales de despertar, además de que la bruja tampoco estaba en su mundo.

Miles de pensamientos atacaron su mente, desde ideas sobre su novio estando herido, el que se olvidara de quién era, o que el Demonio Lobo lo hubiera lastimado.

Sea como fuera, su desesperación crecía a cada instante, y tanto gruñidos como chillidos empezaban a salir del Alfa que se mantenía con las orejas y la cola hacia abajo.

—Ya cálmate, de haber pasado algo malo todo estaría perdido —dijo Ziyi—. La tierra ya no tiembla, y el cielo está tranquilo.

—¿Entonces por qué aún no despierta?

—No lo sé, pero tal vez el tiempo pasa diferente en ese mundo al conectarse con él —comentó Huaisang —. La misma bruja lo dijo, puede tardar en atravesar su alma.

—Pero ya no puedo esperar —insistió olfateando al Omega—. Ya quiero que despierte...

—Ya basta —instó Ziyi dándole un golpe en la cabeza con su pata—. Te comportas como un cachorro engreído.

—¡Oye!

—Es la verdad, siempre eres así —añadió Haikuan

—No soy un cachorro, ustedes no entienden lo que se siente que tu Omega esté en ese estado. Zhan es todo para mí y lo necesito... —se sentó chillando.

—¡Ya deja de llorar! —gruñó su hermana

—¡No puedo! ¡Ya quiero que despierteeeeeeeeeee! —aulló haciendo un puchero

—No lo puedo creer, y se supone que es un Alfa —rodó los ojos Huaisang

—Yo creo que está asustado, deberíamos calmarlo en lugar de hacerlo llorar más —dijo Yubin

—No tiene por qué estar asustado, la energía oscura ya desapareció

—¡¿Entonces por qué no despiertaaaaaaaaaaaaaa?! —aulló otra vez

—Voy a golpearte si no te calmas —le advirtió Ziyi.

El azabache escuchaba la discusión entre los lobos, pero aunque quería decir que estaba bien, no podía despertar por completo, pero incluso estando así, la idea de que su Alfa estuviera aullando lo hacía sentir mariposas en el estómago, aunque estás también venían acompañadas de nauceas y un extraño antojo por comer fresas bañadas en chocolate.

—Alfa... —logró murmurar aún sin abrir los ojos.

—¡Zhan! —movió la cola el lobo antes de empezar a lamer todo su rostro

—¡Ya basta! ¡Deja que despierte por completo! ¡Lo estás llenando de baba!

—Dejalo, está emocionado —sonrió Yubin

Xiao Zhan finalmente pudo pestañear e ignorar el brillo que aparecía en su vista por despertar, y fue recuperando los sentidos lentamente.

—Te escuché aullando...—miró al castaño que ya había cambiado a su forma humana

—Te demoraste mucho en volver, me asustaste —lo abrazó olfateando su cuello

—Lo siento —sonrió agotado.

Wang Yibo y los demás lo ayudaron a levantarse y sentarse junto a la chimenea, estaban en la casa de la bruja esperando a que todo terminara, y finalmente el Omega había despertado, sólo era cuestión de tiempo para que tanto Yanli como la bruja aparecieran.

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