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Narrador pov.

La pelinegra decidió tomar un descanso, casi toda la mañana se lo había pasado entrenando, agarro su botella de agua y tomo un sorbo.

Se sentó en la silla mientras trataba de reponer toda la energía que había perdido, a su lado se sentó Joseph mirando a Emma con una sonrisa.

-¿agotada?.-inquirió Joseph en tono divertido, Emma negó con la cabeza.

-Algo.-contestó Emma volteando a verlo.-Tengo una pregunta ¿Conoces a Billy Black?.

Emma notó como Joseph se tenso.

-Si, hace algunos años ¿Qué es lo que te dijo?.-inquirió Joseph cauteloso, Emma se encogió de hombros.

-No mucho.-admitió debatiéndose si decirle o no.-Solo que tuviera cuidado con tu sobrino.-al final decidió decirle.

Joseph se puso de pie molesto.

-Y pensar que habíamos quedado en un acuerdo.-murmuró él, Emma frunció él ceño pero finalmente no pregunto nada, después de todo no era su asunto.-¿Cómo te ha ido con Charlie y su hija?.-preguntó Joseph cambiando de tema.

Emma sonrió sin poder evitarlo.

-Solo con ellos he logrado sentirme en familia.-respondió Emma pensando en su cercanía a Charlie, soltó un suspiro.

-Algo te preocupa ¿Verdad?.-cuestionó Joseph elevando una ceja.

-No es algo que me preocupe realmente solo que estoy indecisa... Bueno lo admito estoy un poco preocupada pero no es por mis sentimientos hacía Charlie es por otra cosa.-Emma trato de buscar las palabras adecuadas.

Ella tenía claro que no tenía miedo a enamorarse de Charlie, tal vez lo único que le tenía miedo era a su rechazo, no ella no seria capaz de soportarlo, aunque era fuerte, se sentiría incómodo la convivencia entre ambos porque ya nada seria igual si Charlie no correspondía a sus sentimientos.

O eso pensaba ella.

-¿Quién diría que él jefe Swan te enamoraría?.-Joseph sonrió divertido y después frunció el ceño.- A veces tenemos miedo al rechazo pero es algo que tu tienes que enfrentar, estoy seguro que Charlie siente lo mismo por ti. Ahora solo me queda una duda ¿Qué es lo que te preocupa?.

Por un momento Emma cerró sus ojos, ella no creía para nada en los presentimientos o en cosas sobrenaturales, porque para la pelinegra todo eso era como cuentos de hadas.

-Presiento que algo va a suceder aunque no creo que sea algo bueno.-murmuró Emma, miró la hora y se dio cuenta que ya tenia que volver a casa.-me tengo que ir, nos vemos después Joseph.-Se despidió la pelinegra agarrando todas sus cosas.

Al llegar a casa, se encontró con Bella, Jacob y Billy afuera de la casa, estacionó su moto y se bajo.

-Hola, Billy. Hola, Jacob.-los saludó Emma amablemente y miro a Bella.-Creo que Bella ya les dijo que

Charlie se ha marchado para todo el día.

-Si ya les dije.-comentó la castaña.

-Solo queríamos traerle esto.-señaló la bolsa de papel marrón que llevaba en el regazo.

-Gracias.-le dijo Emma, aunque no tenía idea de qué podía ser.- ¿Por qué no entramos un momento?.-Intento mostrarse indiferente al intenso escrutinio de Billy mientras abría la puerta y les hacía señas para que la siguieran.

-Es pescado frito casero de Harry Clearwater, el favorito de Charlie. En el frigorífico estará más
seco.-comentó Billy mientras le entregaba a Bella la bolsa

-Gracias.-repitió Bella.- Andamos en busca de nuevas recetas para el pescado y seguro que Charlie traerá más esta noche a casa.

- ¿Se ha ido de pesca otra vez.-Preguntó Billy con un sutil destello en la mirada.-¿Allí abajo, donde siempre? Quizá me acerque a saludarlo. Emma estaba a punto de responder pero Bella se apresuró.

-No.-mintió Bella rápidamente, endureciendo la expresión.-Se ha ido a un sitio nuevo...,y no tengo ni idea de dónde está.- Emma se percató de la expresión de Bella pero no dijo nada, solo pensaba en porque Bella parecía molesta.

-Tengo que ir hacer algo en un momento vuelvo.-Dijo Emma mientras subía por las escaleras, necesitaba dejar sus cosas, cuando bajo escuchó la voz de Billy advirtiéndole algo a Bella.

-Tal vez lo ignores, pero la familia Cullen goza de mala reputación en la reserva.

-La verdad es que estaba al tanto.-le explicó Bella con voz seca; aquello le sorprendió a Billy.-Sin embargo, esa reputación podría ser inmerecida, ¿no? Que yo sepa, los Cullen nunca han puesto el pie en la reserva, ¿o sí?

-¿Quién no ha puesto un pie en la reserva?.-inquirió Emma viendo como los dos parecían a la defensiva.

-Diganle a Charlie...-Billy se detuvo antes de continuar.-que hemos
pasado por aquí, ¿sí?

-Lo haré.-murmuró Emma algo sorprendida por la repentina decisión de Charlie.

Emma estaba sentada en la sala distraída pensando en varias cosas, definitivamente algo estaba pasando y ella no tenía ni idea de lo que se trataba.

La puerta principal se cerró de un portazo y escuchó a Charlie avanzar dando tropezones cerca de las escaleras, mientras guardaba el aparejo de pesca. Emma sonrió y se puso de pie.

-¿No hay saludo para tu esposa?.-inquirió Emma reclinándose en la pared.

Carlie rió nervioso.

-Claro que si, pensé que estarías en la habitación.-Charlie se acerco hasta Emma para darle un beso en la mejilla.

-Estábamos Bella y yo viendo una película pero Jessica la llamó.-aclaró Emma con una leve sonrisa.

-¿Cómo te fue en tu entrenamiento?.-Pregunto Charlie mientras abrazaba a Emma.

-Bien, aprendí nuevas técnicas.-respondió Emma.-¿Qué tal te ha ido la pesca?

-igual Bien, he metido el pescado en el congelador.-ambos se separaron.

-Voy a sacar un poco antes de que se congele. Billy trajo pescado frito del de Harry Clearwater esta tarde.- Emma hizo un esfuerzo por sonar alegre, para no preocupar a Charlie.

-Ah, ¿eso hizo?.-los ojos de Charlie se iluminaron y Emma sonrió.- Es mi favorito. Se lavó mientras ella preparaba la cena. Charlie disfrutaba de su comida, y del ambiente familiar que él sentía por primera a lado de Emma y Bella.

 Charlie disfrutaba de su comida, y del ambiente familiar que él sentía por primera a lado de Emma y Bella

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𝑴𝒂𝒓𝒓𝒊𝒂𝒈𝒆 𝒐𝒇 𝒄𝒐𝒏𝒗𝒆𝒏𝒊𝒆𝒏𝒄𝒆 | 𝑪𝒉𝒂𝒓𝒍𝒊𝒆 𝑺𝒘𝒂𝒏Where stories live. Discover now