Capítulo 37

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Bakugou: (Mira a Kirishima por un tiempo, luego ve a Deku que tenía una expresión igual de triste. Mira al piso) No quiero. (Lo mira nuevamente) ¿Por qué debo dejarlo?... ¿por qué?... ¿estoy destinado a estar solo?... ¿Por qué las personas que amo se van? ...

Kirishima: Nunca te pusiste así de egoísta... (Decía decepcionado) Estoy también para vos, aunque sea para que no te sientas tan solo, siempre te dije que podías venir con nosotros. (Lo mira dolido por su última pregunta) Si te hace sentir mejor, yo también estoy sufriendo, también estoy con una humana y me da miedo que llegue a la vejez como Midoriya. Pero creo que ambos estarían más felices si lo dejas ir en paz y no forzarlo a que siga su siclo de vida... cuando ya termino... (Decía mirándolo algo angustiado)

El pecoso se levanta del lugar en donde estaba y "abraza" al rubio de por atrás, el mayor se queda paralizado por las palabras del pelirrojo y el tacto que tenía del peliverde. Al rato esa presión en su abdomen, que serían los brazos del pecoso, desaparece, ya que el efecto de esas frutas se estaba yendo.

Bakugou: (Al sentir como las manos del chico desaparecían una gran pena y frustración aparecía en su ser) ¡No! Deku... por favor- (Iba a seguir hablando hasta que siente un olor nauseabundo, el cual hace que se tapara la nariz rápidamente) ¿Qué es ese olor? (Amplía su vista y ve el cuerpo descomponiéndose de Deku. Lleva sus manos a su boca y las lágrimas comenzaban a salir) Yo no quería.... ¿Qué hice...?

Se acerca más al pobre cuerpo que tenía una sonrisa dulce. El pecho le dolía enormemente y las lágrimas en sus ojos le nublaban un poco la vista, pero no tanto como lo habían hecho aquellos frutos.

Bakugou: Perdón.... (Se arrodilla ante el cuerpo) Perdóname.... tenías razón, tenía que dejarte descansar en paz.... perdón Deku (Se seca las lágrimas con el dorso de su mano, se levanta y se vuelve a Kirishima) Tengo que sepultarlo. (Decía firme, sonando como un jefe de una manada)

Kirishima: (Pone una mano en su hombro y lo atrae de a poco para que el rubio hunde su cabeza en el cuello y hombro del rubio) Si... tranquilo, te dejaste llevar por el deseo de seguir teniéndolo cerca... ¿Queres sepultarlo acá o en un prado?

Bakugou: No sé.... (Se queda pensando) En un prado. Creo que a él le hubiera gustado más.

Kirishima: Okey... habría que envolverlo en algo y te puedo llevar a uno muy lindo que siempre veo que cuando vuelo...

Bakugou: Voy a buscar unas pieles que... (Toma aire) Él había cosido (Se separa de él y va a buscar las pieles con expresión sepulcral)

El colorado sonríe algo aliviado y ayuda a envolver el cuerpo del chico. Lo atan con unas sogas viejas y el rubio lo carga como una princesa, hunde su cara en donde estaría la cara del chico para darle un último "beso".

El pelirrojo se trasforma en dragón y se acuesta para que el rubio pueda subir. El dragón emprende el vuelo y llegan a un prado de flores amarillas y violetas el rubio baja con el chico en brazos. Kirishima hace un poso largo y onda para dejarlo allí.

El rubio aguantando las ganas de mandar todo a la mierda deja con delicadeza el cuerpo del chico en el pozo. Pone tierra encima del cuerpo y pone las iniciales del menor sobre la tierra.

Bakugou: Que descanses Izuku....

El pelirrojo busca una piedra plana y se la da al rubio para que talle su nombre y años. Se quedan un rato allí hasta que el viento sopla frio.

Al cabo de los años el rubio iba con el pelirrojo, o solo, a visitar la tumba de Deku. El rubio ya se habia acostumbrado a tener una vida solitaria nuevamente, pero tenía con que entretenerse, algunas procesiones del pecoso que tenía escondidas.

Hasta que un día un niño pequeño de unos 6 años jugaba solo en el bosque, con cabellos rizado verdes, pecas y un diente salido.

Midoriya: (Llega a la cueva y le da un vistazo a todo el lugar) ¡¡¡HOLA!!! (El "hola" del niño rebota en toda la cueva, hasta que una sombra con orejas y cola topa su visión) Waaa... ¡¿Sos un hombre lobo?! (Decía con una sonrisa)

Bakugou: (Lo mira de arriba a abajo con un semblante serio, ya que más que mirarlo lo estaba examinando) Se parece tanto a... (Suelta una sonrisa dulce y pasa por al lado del chico) No, ¿Cómo crees? (Decía irónicamente mientras movía a propósito su cola, a medida que iba a cazar algo para la cena)

Midoriya: ¡¡Si lo sos!! ¡¿Puedo tocar tu cola y tus orejas?! (Lo seguía de por atrás)

。✧。FIN 。✧。


En peligro de extinción. (Baku Deku)Where stories live. Discover now