Cap 18

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Su corazón empezó a latir fuerte y al cerrar las ojos se separó de él empujandolo un poco.

—esta bien, ya.. No gritare—dijo mientras se daba la vuelta con un sonrojo en sus mejillas.

Thyme avergonzado rasco su nuca

—sí.. Eres muy ruidosa—empezó a reír un tanto nervioso.. Logrando un ambiente algo incómodo

—como sea.. ¿Para que querías mi ayuda?

Thyme carraspeo y acomodo su chaqueta

—bueno.. Necesito encontrar un regalo para lia, tiene que ser algo lindo, pero.. También que sea costoso pero que no lo aparente

Gorya sonrió de lado incrédula y volteo a mirarlo

—thyme.. La conoces desde que son niños ¿Porqué razón yo sabría más de ella que la conozco desde menos de 6 meses que tu?

Thyme se sentía avergonzado, era real.

Casi no conocia tanto de lia, solo que gustaba de el.

si antes no conocía nada ahora menos ya que sus gustos habian estado cambiando demasiado y drásticamente.

—es un poco.. —agachó la cabeza —como sea.. Me vas a ayudar o no..

Gorya cruzó los brazos y empezó a caminar hacia la salida..

—esta bien.. Tiene que ser este fin de semana, de recompensa por ayudarte tu también me ayudaras a elegir el mio—salio de la azotea sin escuchar alguna respuesta del más alto.

Thyme proceso todo y en segundos se dio cuenta que si recibirá ayuda de gorya,  por lo cual sonrió ampliamente, realmente conseguiría el regalo perfecto para acelerar el corazón de lia.

En la tarde Thyme esperaba pacientemente a gorya, en realidad paciente no era la palabra clave para describirlo, ya se estaba cansando de esperar, pero sabía que si se iba o ponía de una manera un tanto altanera probablemente gorya se iría de ahí sin recibir nada de su ayuda.

A pesar de todo gorya había llegado, con 15 minutos de retraso pero había llegado

—lo siento mucho Thyme, el transporte en el que venía tuvo un percance y tuve que venir caminando—gorya trataba de calmar su respiración agitada.

Thyme la miró por unos segundos, sabía que no era buena idea echarle en cara su retraso, además de seguro camino demasiado.

Thyme se paró de la banca en la que estaba.—espera aquí

Fue lo único que dijo para después caminar sin rumbo aparente para la pelinegra.

Gorya suspiro y se sentó en el lugar que anteriormente thyme ocupada, empezó a jugar con sus manos pero una notificación llamo su atención, sacó su celular pero este inmediatamente lo prendió se apago, llevaba varios dias haciendo lo mismo, y aunque su padre y hermano intentaron arreglarlo al parecer no funcionó.

𝕺𝖓𝖊 𝖒𝖔𝖗𝖊 𝖋𝖑𝖔𝖜𝖊𝖗Where stories live. Discover now