Belleza Oscura

E X T R A

Hechos de antes de Año Nuevo.

Santiago

Es casi el final de la clases y la verdad es que odio estar aquí. Si lo hago es porque quiero cumplir mi sueño de estudiar robótica en la universidad y para eso, tengo que ser buen estudiante para ser admitido.

Hay una clase de cierre de proyecto en el instituto y era en grupos. Pero yo hice esa cosa solo.

La temática son Pirámides de la Antigua Egipto.

Yo me estoy paseando por la cancha con mi mini Pirámide hecha de cartón y una hoja donde se supone que tengo los puntos que tenía que estudiarme. Digo tenía, porque en realidad no estudié nada.

Un pro, wey.

A esto le llamo, ser procrastinador.

Llego al grupo donde están André, Diego, Alex y Daniel, arreglando su stand para hacer la exposición.

—Hey, chicos —saludo.

Daniel intercala la vista en mi Pirámide y yo. Mi Pirámide y yo.

—¿Qué es eso? —pregunta estupefacto.

—Mi Pirámide —respondo.

El robusto sigue intercalando la mirada y está comenzando a hastiarme hasta que de repente dice:

—¡La mía es igual a esa!

Y yo como que de repente estoy feliz.

Los chicos tenemos algo que cuando las cosas que hacemos nos salen igual, nos ponemos felices e incluso, depende de la gravedad del asunto, a celebrar.

Estoy de buen humor ahora.

Daniel saca de debajo de la mesa su maqueta y la compara con la mía. Sí, son iguales excepto de que él la hizo con cartulina y la mía está hecha de cartón.

—¡Es genial! —exclamo.

—Si eso es genial —empieza a decir André—, miren eso.

Paola, Mía y Layla están entrando a la cancha con una maqueta del tamaño de un carrito chocón.

Exagerado.

Bueno, tal vez esté exagerando, pero es que esa maqueta es enorme. Y la Pirámide está muy bien elaborada, así que no puedo evitar sonreír.

—Si nos ponemos a ver —dice Diego—, Layla ha destacado este lapso escolar como la mejor alumna.

—¿Cómo sabes eso? —pregunta Daniel—. ¿Te lo dijo algún director?

—No, idiota, es sólo que esa chica no para de impresionar a medida que camina. Es increíble.

Lo es.

Ejem, ejem.

La maqueta, no ella. ¿En qué estabas pensando?

Yo no pienso. Soy tu propio subconciente así que literalmente estás hablando contigo mismo, idiota.

Me estoy volviendo loco, Dios.

Veo como las chicas acomodan su maqueta en su stand ya listo y decorado a la perfección.

A veces quisiera ser así de responsable, pero no puedo evitar pensar antes en otras cosas y dejar todo para último momento.

Puede que entregue trabajos a la fecha, pero nunca me quedan tan bien como a esas chicas. He aquí mi maqueta como ejemplo.