~21~ Viejos Recuerdos

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(20 de julio 2018, viernes)

Acabo de llegar a España después de un vuelo desde Atlanta.

Por ahora no tendré que grabar nada más. Así que voy a estar un tiempo en Madrid con mi familia. Este fin de semana toca carrera así que Carlos ya está allí.

Después de un viaje de media hora llego a la puerta que abre la casa de mi persona favorita. Pico a la puerta tres veces y escucho unos pasos al otro lado de la puerta. La puerta se abre lentamente dejando ver una hermosa sonrisa de mi abuela al verme.

-Emma!- dice abrazándome.

-Abuela!- digo devolviendo le el abrazo. Entro en su casa y un olor viene de la cocina- ¿que estas cocinando?- digo curiosa.

Ella me dice que la siga y así hago. Al entrar veo muchos utensilios de cocina por todos lados. Si algo he heredado de mi abuela es ser desordenada.

-Estaba haciendo galletas.- me acerco a la mesa y con el dedo cojo un poco y ella me regaña al hacer eso como cuando era pequeña, y empiezo a reír. Meto la masa que tengo en el dedo en la boca y me derrito al probarlo. Esta delicioso como siempre- era la receta favorita de tu abuelo y también la tuya, así que cuando no estás y no os tengo a ninguno de los dos, hago esta receta para teneros más cerca- me dice algo apenada y yo la miro con pena y ternura a la vez y le doy un abrazo.

Mi abuelo fue el amor de su vida. Mi abuela era el alma gemela de mi abuelo y lo mismo al revés. No podían vivir el uno sin el otro. Cuando mi abuelo falleció fue muy duro para todos pero sobre todo para mi abuela quien había perdido a su media naranja.

Se que es mucho de cuento pero no sería increíble encontrar a esa persona que te complementa. Esa persona sin la que no puedes vivir. Esa persona que los días sin el es más gris y en cambio cunado esta el los días son claros y soleados. Ojala algún día encontrar a mi alma gemela, a mi media naranja, al amor de mi vida.

Mi abuelo era alguien muy especial para mi. Recuerdo cuando nos sentamos en la terraza a comer galletas sin decir nada simplemente apreciando la compañía del otro. O cuando me llevaba al parque para montarme en los columpios, o cuando me regalaba una chocolatina cuando me hacía daño al caerme.

Nos sentamos en la terraza de su casa apreciando el atardecer, viendo como el cielo se pintaba se tonos naranjados. Hablamos de todo de como estábamos, de como iba todo por Madrid, etcétera.

Ya era tarde y decidí irme a mi casa que no estaba muy lejos. Al entrar sonreí. Hacia tiempo que no venia pero seguía todo como siempre y oliendo a limpio. Me tumbé en la cama y mi teléfono empezó a sonar. Cogí el teléfono sin mirar quien era.

-Hola- pregunte.

-Holaa Em-dijo una voz al otro lado de la pantalla, la cual reconocí al instante.- me he enterado que estas en España. También gracias a Noah se que tienes vacaciones. Bueno te llamaba para decirte que estas invitada, mas bien estas obligada, a venir con nosotros de vacaciones a Mallorca.

-Con lo de vosotros te refieres a ¿tu familia y a ti? pensaba que pasaríais las vacaciones en Madrid.

-No Emmita que no te enteras me refiero a Max, a Daniel, a Pierre, a Checo, a Seb, a Jules, a Charles y a hijos y parejas. Y estáis obligados a venir ,por todos nosotros, tu, Noah y Isi. Así que prepara las maletas. El miércoles te paso a buscar por tu casa y nos vamos.

-Pero...- de repente me colgó-a veces te odio.- dije rodando los ojos.

Pues nada no creo que me quede mucha opción ir. Bueno si algo se, es que me lo pasare bien. Ademas adoro la casa de Mallorca de la familia Sainz. En ella había pasado muchos veranos y  tengo muchos buenos recuerdos.

MI TODO ~~~Charles LeclercWhere stories live. Discover now