Capitulo Dos.

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– ¿Si?—Me gire a verlo el cual ya se los dije que esta mega guapo, es rubio, tiene ojos azules claros como los míos, labios rosados y carnosos, es lindo y aún sigue en mi lista de los anónimos J.D.

–Primero ¿Te puedo ayudar con tu maleta?—Me quito la maleta donde llevo la ropa sucia del gimnasio.

–Am si claro. —Seguimos caminando por el pasillo hacia la salida.

– ¿Es cierto que sales con Dalton?—Me soltó de golpe la pregunta la cual me hizo reír.

–No, no ando con Dalton, solo somos amigos.

–No me contestes si es muy personal pero porque mentir. —Se encogió de hombros, se le nota muy relajado, más de lo que me esperaba. –Hacen bonita pareja. —Ok descarto a este chico como J.D. ya que si fuera él no me diría que hago bonita pareja con Dalton.

–No lo sé, somos amigos desde los 13 años, y pues no sé, lo veo solo como amigos.

–Pues tiene suerte de tener una lindura de amiga. —Ok vuelve a la lista. Pero me sonroje, si me sonroje, mis mejillas arden levemente, yo sonrojarme, nunca me había sonrojado. Dios que me pasa.

–Am gracias Creo.

–Ya que me quedo claro que tú y Dalton no están saliendo, quería saber si quieres ir a la fiesta de esta noche ¿Conmigo?—Eh escuchado rumores sobre la fiesta, dicen que será la más grande del año, será en casa de Julián y Destiny ya que es el último año de Julián en el instituto.

–Eh no lo sé, estoy castigada por reprobar lenguaje y no creo que mi hermano me deje salir la verdad.

– ¿Qué te parece si me pasas tu numeró y te llamo más tarde, y me dices si te dejaron o no?—Me parece buena idea, ya estamos fuera de la escuela en la entrada, por suerte esta techada.

–Bien. —Saco una pluma de su bolsillo para extendérmela, apunte los números en su brazo.

– ¿Es de casa?—Dijo notando que el numeró es demasiado corto.

–Sí, celular castigado. —No note pero ya estamos muy cercas uno del otro, es más alto que yo, le llego a la barbilla la cual no me había dado cuenta que tiene un pequeño lunar en ella, Sonó la bocina de un auto, al girarme esta Federico esperándome.

–Me voy. —Me dio un beso en la mejilla delicadamente, ese chico es de en sueños.

–Elsa, una pregunta ¿Subirás el vídeo de Paola a la red?

–No soy tan mala, solo lo quiero para mostrárselo a mi hermano y la deje. —Una sonrisa apareció en su rostro.

–Sabía que no eras así, eso me gusta. —Me entrego la maleta y salí corriendo hasta el auto.

Lance la maleta a la parte trasera del auto, Federico subió el volumen del radio y no dijo nada hasta que no resistió más y se orilló para detener el auto.

– ¿Quién era ese idiota?—Ni siquiera me ve, tiene su vista clavada al frente, bajo el volumen del radio enojado.

–Un amigo.

– ¿Un amigo?

–Si un amigo ¿Hay algún problema?

–No. —Encendió el auto de nuevo sin decir nada, al llegar a casa se bajó y fue directo a su habitación.

– ¿Qué le pasa?—Pregunto Josh desde el sofá enredado en mil mantas.

–Me vio en la escuela hablando con un amigo.

Idiota. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora