Capitulo Trece.

16.7K 903 2
                                    

Sé que le ira mal a Julián con los del equipo ya que se dejó perder. De hecho aún no lo puedo creer que eso pasara, aún tengo su imagen caminando a mí y tomando mi mano para llevarla a su pecho y jalar del gatillo.

-Oye será bueno tener a los del equipo de futbol como sirvientes por un día.-Dijo Carter mientras caminamos por un parque en dirección a mi casa. Si a Josh se le olvido pasar por mi o más bien por nosotras. Pero está bien, caminar no me hará ningún mal.

-Me sorprende que Julián no te acompañara hoy.

-Si, de hecho no lo vi desde que acabo la clase de deporte, ¿Quién sabe dónde se metió?

-¡Auxilio!-Gritaron desde algún lugar del parque.

-Esa no es la voz de.-Dije.

-Auxilio, estamos colgados.-Era la voz de Dalton la que grito.

-¡Dalton!-Dijimos a unísono y corrimos en dirección del grito encontrándonos a Julián y Dalton colgando del árbol algo golpeados.

-¿Que les paso par de idiotas?-Les grito Carter.

-Batalla de pinball.- Contesto Julián.

-Y yo por ayudarlo.

-¿Nos ayudan a bajar?-Ubicamos donde estaba atada la cuerda y Carter sin tientas la desato dejándolos caer de cara contra el pasto.

-¡Carter!-Gritaron ambos ya en el suelo.

-Lo siento.-Los ayudamos a levantarse y curar un poco sus heridas, Carter y yo regresamos a la escuela junto con los par de idiotas por el auto de Julián y Dalton.

-¿A dónde iban?-Me pregunta Julián ya en el auto. Ver su ojo morado y su labio abierto me da lástima, pensar que por mí eso le paso.

-A mi casa, creo que a Josh se le olvido que tiene hermana.-El tomo mi mano y la beso haciendo un pequeño gesto al lastimarse.

-Pues es suerte para nosotros, ya que si ustedes no hubieran pasado seguiríamos colgando de cabeza.

-No tenías que sacrificar esa victoria.

-Claro que sí, no puedo dejar que mi novia pierda.

-Sueña extraño.

-¿Qué?

-Lo de novia.-Me reí un poco y el me miro.

-Si, eres la segunda novia que tengo, será un poco extraño decir de nuevo esa palabra.

-¿Segunda novia?

-Si.-Soltó mi mano para meter los cambios de velocidad necesarios y la volvió a tomar.-Helena fue mi primera novia.

-¿Y qué paso con ella?

-La encontré con mi mejor amigo en la cama, desde entonces ya no confiaba en nadie, hasta que te conocí.

-¿Y aun la vez?

-Sí, es la mejor amiga de Galilea, de hecho va a nuestro instituto.-Creo recordar haberlo visto con una rubia de ojos azules pero su rostro me es vago aun.

-Lo siento Julián.

-No te preocupes, mejor olvidamos eso y nos enfocamos en lo que venga para nosotros.

-¿Cómo hablar con mis padres?-Se gira a verme y levanto sus cejas.

-Si, y créeme que lo hare.

-Eh era broma.

-No, si lo pienso hacer Elsa justo ahora.-El portón se abrió dejando ver el auto de Federico cargado con sus casas junto a la entrada. -¿Federico se muda?

-No que yo sepa.-Baje del auto y la primer gota de lluvia de la tan esperada tormenta de invierno callo sobre mi rostro. Mire dentro de su auto y como lo dije, lleva todas sus pertenencias.

-Elsa ayúdame.-Josh salió de la casa con dos cajas y una se le esta cayendo, Julián la tomo antes de que callera encima mío.-Gracias hermano, sabían que Federico colecciona pura basura.-Mire dentro de la caja y no lo puedo creer, todos los dibujos que yo le daba los guardo, cada manualidad que yo le regalaba la tiene, inclusive un lápiz con la letra F hecha en formi para que no perdiera el lápiz en la escuela.

-¿Porque se muda?-Pregunte

-Su papa le compro un departamento cercas de la uní, y yo me ir a quedar con el cuándo nuestros padres estén en casa para no dejarte sola.-Me rodeo y se fue junto con Julián a dejar las cajas al auto y vi a Federico saliendo con más cajas.

-¿Porque?-Me pare frente a él.

-¿De qué hablas pequeña?-Me rodeo y les entrego las cajas a los chicos y después regreso para ir a su cuarto, lo seguí y al entrar cerré la puerta.

-¿Porque?-Volví a preguntar.

-No insistas Elsa, nada que me digas me hará quedarme, ya lo dijiste todo en la madrugada.

-No, no me refería a esto Federico, no quiero que te vayas.-Lágrimas comenzaron a salir sin control, no quería que se fuera, que me dejara sola.

-Adiós Elsa, espero que tu relación con Julián sea lo que necesitas para olvidar tu pasado.-Dejo un beso en mi frente y tomo su última caja y salió.

Idiota, eso es lo que eres Elsa.

Corrí a mi habitación y la cerré por dentro, no quería ver ni escuchar a nadie, a quien realmente amaba se acababa de ir y no volvería.

2 días después.

Desde que Federico dejo esta casa ha estado lloviendo a más no poder. En tres días es navidad y mis padres están emocionados ya que vienen los abuelos y amigos de negocioso de ellos a la gran cena que ofrecerá mama.

El teléfono sonó y por lo visto no hay nadie en la casa ya que se paró y volvió a sonar.

-Hola.

-Si buenas noches, hablamos del hospital san Francisco para informarles que el Joven Federico Dónovan tuvo un accidente y está en la sala de urgencia con heridas de gravedad.

-¿Seguro? ¡Federico Dónovan!

Tenía miedo a la respuesta. Al confírmame la voz al otro lado del teléfono se calló al suelo. Mi vida entera se derrumbó al pensar que Federico puede morir.

Tome mi celular eh dinero y salí a la calle sin importarme que fueran las 2 am.

3 horas después.

-¡Te lo dije Federico!-Lance la bolsa con medicamentos a la barra de su departamento y lo ayude a sentarse en el sofá para después quitarme la chaqueta mojada.

-Elsa tranquila estoy bien.

-Nada, sabes que no me gusta que bebas y conduzcas, mil veces te lo dije.-Le decía molesta, no puedo creer que por un maldito lio de faldas se fuera a emborrachar, a pelear y de pilón darse en la madre solo por coraje.

-Elsa, Cariño estoy bien, solo fue un brazo roto y una pierna herida, nada de gravedad.-Y aún sigue borracho. Maldito idiota.

livehd.me 

Idiota. Where stories live. Discover now