Idiota.

Capitulo Diceisiete.

Narra Eithan Avan.

Son las 10 am y no lo creo, tengo los resultados de ADN en mis manos y son positivos. Mi vida acaba de dar un giro de 180°. De ser un pobre diablo solo sin familia y sin perro que me ladre hoy tengo una hija, una hermosa hija de 16 años.

—Doctor ya están listos los resultados del cardo. —Entro a la habitación y me entrego los papeles. —No son buenas noticias. —Mire con detención los papeles y mi alma se me va del cuerpo.

Narra Josh.

Papa me saco de la delegación y por desgracia igual a Federico, vamos los tres en el auto y no sé qué hacer ni que decir.

— ¿¡Que!?—Dije al escuchar lo que acaba de confesar mi padre. ¿Cómo que Elsa no es hija de Diego Delgado?—No, no es broma cierto, Elsa es tu hija, tú la vistes nacer y crecer.

—Me duele más a mí que a ti, le amo es mi hija, pero de igual manera sé que su padre pedirá sus derechos.

—No, ¿Dónde estuvo el cuándo Elsa se enfermaba? ¿Dónde estuvo cuando Elsa lloraba por las noches y gritaba? ¿Cuándo a Elsa la violaron?—Vi perfectamente como Federico se le fue el alma del cuerpo.

—Él tampoco lo sabía Josh, se acaba de enterar y está luchando por salvar a Elsa y si lo hace le deberé mi vida a él.

— ¿Y mama?

—No lo sé y ni me interesa, le entregue todo a ella, todo hasta mi vida entera y me traicionó.

—Tengo que hablar con ella. —Me fui de ahí en busca de mama, tiene mucho que decirme.

La encontré hablando con su amiga Lorena.

—Tenemos que hablar. —Le digo frio.

—Oye por más que estés enojado es tu madre Josh, no puedes faltarle al respeto. —Me dice la vieja. Jamás me callo bien ya que le coquetea a mi padre descaradamente.

—Usted no se meta vieja metiche.

—Lorena tranquila, déjame con mi hijo. —Ella se fue molesta y yo sonreí cual don cangrejo al ver dinero frente a él. Si amo Bob esponja.

— ¿Que te falto en casa mama?—Ella me niega con la cabeza y me señala la cafetería y camine a ella. Nos sentamos en una mesa retirada de las demás donde podríamos hablar en privado.

—Cuando tu tenías tres años yo conocí a Eithan, era un joven de 22 años y muy apuesto. —Por un momento vi una sonrisa que jamás había visto en mama. —Era pintor, lo conocí en la plaza mayor de España, él te pinto y me enamore de sus ojos azules. Esos ojos que transmitieron una paz inigualable. Nos siguió al hotel y ese día yo tuve una pelea muy fuerte con tu padre, él te llevo consigo y yo salí a caminar. El me invito un café y pues me escucho y una cosa llevo a la otra.

— ¿Cuánto tiempo duro tu romance?

—Dos años hasta que quede embarazada de Elsa.

—Pero si te metías con los dos como estas segura de que es de él y no de mi papa.

—Al principio no lo sabía, después cuando crecía noté sus ojos y su comportamiento, sus gestos en todo se parecía a él, no había duda en que él era el padre.

— ¿Sabes que has matado a mi padre? Le has quitado el alma del cuerpo al decir que la niña de sus ojos no es nada suyo.

—Me duele más a mí, saber que por mi aventura mande a la cañería 25 años de matrimonio pero no me arrepiento. No me arrepiento de mi hija. ¿Y si para volver a tenerla implica engañar de nuevo a tu padre? Lo volvería a hacer. —Sea lo que sea amo a mi hermana, y no me imagino una vida son la pequeña adulta que me fastidia con que madure y cosas así.