15. Barcelona

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-¿Te dije o no te dije que ibas a terminar involucrándote con ese muchacho? Ya nadie le hace caso a esta pobre anciana. -Se llevó una mano al pecho, indignada.

-Yo sigo creyendo que no es real. No entiendo cómo alguien así se fijó en mí. -Dije con una mueca.

-Se fijó en ti porque eres real, Marianne. Una persona común que tiene problemas y no aparenta nada. Debe estar acostumbrado a que la gente que lo rodea solo quiere algo de él. ¡Tú lo amenazaste, por el amor a Dios! -Habló Margot.

Reí. Toda mi historia con Charles había sido intensa. Si no me hubiera pasado a mí, creería que era sacada de una novela barata.

-Creo que eso fue lo que le llamó la atención de mí, definitivamente. -Dije.

-Y lo que lo enamorará, confía en mí.

Un escalofrío recorrió mi cuerpo. No había nada más peligroso y destructivo que el amor.

Había pasado a la cafetería de Margot después de un pesado día en la universidad. Las clases iban bastante bien, había encontrado la forma de poder estudiar y tener todas mis tareas al día. Al fin y al cabo, a eso había venido a Mónaco, lo demás quedaba en segundo plano.

Me despedí de Margot y salí de regreso a casa. Tenía que terminar algunas tareas y comenzar a hacer la maleta que iba a llevar a España.

Según me había dicho Charles, además de las prácticas, la clasificación y la carrera, también íbamos a asistir a un evento el domingo por la noche y volábamos hasta el lunes. Ese día claramente no iría a la universidad así que ya tendría que ponerme al día.

Puse el gran premio de Malasia 2016 en la televisión, era una de mis carreras favoritas y siempre que la veía me hacía sentir mejor.

Me senté en el sofá y le escribí un mensaje a Luke. Tenía ya muchos días sin responder a mis mensajes después de que habíamos quedado en no perder el contacto.

La situación me preocupaba. A pesar de todo, Luke fue esa persona que estuvo para mí en todo momento. Quizá no éramos la mejor pareja ni estábamos destinados a morir juntos, pero lo quería muchísimo. No quería estar mal con él.

Envié el mensaje y me quedé esperando una respuesta que tampoco llegó.

Algo estaba pasando.

Salí del chat de Luke y contesté unos mensajes Crystal alterada por la boda de su cuñada. Decía que prefería encerrarse en una piscina con tiburones a tener que compartir con esa familia otra vez.

Aproveché para contarle que me iba a España y creo que su euforia aumentó aún más.

Si le daba un ataque al corazón, iba a ser completamente mi culpa.

•••••

Estábamos en el aeropuerto de Barcelona esperando que llegaran a recogernos.

Hace unas horas el hermano mayor de Charles había pasado a recogerme al apartamento y ambos volamos juntos hasta acá.

Lorenzo era como una tercera copia Leclerc. Eran tan parecidos entre ellos que hasta asustaba.

No hablamos mucho durante el vuelo porque me quedé dormida al primer segundo, pero lo poco que había compartido con él me dejaba claro que era una gran persona.

Era de madrugada en España y yo no tenía muy claro qué era lo que teníamos que hacer.

-¿A quién tenemos que buscar? -Pregunté.

-Supongo que vendrá alguien del equipo, generalmente tienen choferes designados para recoger a los familiares. -Contestó Lorenzo buscando entre los carteles que habían fuera del aeropuerto.

Realidad ❀ Charles Leclerc Where stories live. Discover now