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Inglaterra, 1489.
—¿Qué hacemos aquí?— Le preguntó Davina a Sueño al ver que habían ido a la tierra, lugar al que la protectora llevaba sin visitar desde hacíacasi cien años, y estar de nuevo allí se la hacíaextraño. El mundo no habíacambiado, pero ella lo sentíadiferente, tal vez la quehabíacambiadohabía sido ella.
—Hace cien años, hice un experimento.Un humanocreía que sería mejor no morir, por lo que le concedí su petición, hoy hace un siglo ello y lo acordado era vernos hoy aquí, para ver si su opinión ha cambiado o no.— Se limitó a decir el señor de los sueños, haciendo que Davina le mirase confundida al no comprender que diversiónpodía haber en ello.
—Eso parece cruel.— Comentó sin entender por que Sueño hacia aquello, ¿cual era el propósito de ello? ¿Destruir a un hombre? —¿Tan aburrida es la vida de un eterno que os tenéis que divertir a costa de los mortales?— Preguntó haciendo que Sueño la mirase con frialdad, por supuesto agradecía que finalmente un protector tuviera el valor suficiente de desafiar a un eterno en el aspecto de llevarle la contraria o de indicarle lo errado que estaba, pero a veces Davina se pasabaaportando su opinión, aunque a ella la daba igual.
—No me divierte, siento curiosidad con respeto al porque una criatura inteligente no quiere morir.— Respondió Sueño mientras los dos entraban en la taberna, y veían que en una de las mesas del fondo se encontrabaHobGadding, el cual aúnestaba intentando entender como era posibleque siguiera vivo y sin haber cambiado ni un ápice.
—¿Cómo sabías que seguiría aquí? ¿Quien eres?— Le preguntó a Sueño ignorando la presencia de Davina, la cual iba escondida en una capa de color negro que apenas dejaba ver algo de ella, únicamente algunos mechones de su cabello plateado. —¿Un brujo? ¿Un santo? ¿Un demonio?— Inquirió sin entender quién era aquel que había hecho realidad el másegoísta de los sueños del ser humano. —¿He hecho un pacto con el diablo?— Preguntó de nuevo, haciendo que la protectora reprimiera una sonrisa, ya que desde la perspectiva del humano parecíalógico, pero desde la perspectiva de ellos no. Undemonionuncahacía nada gratis, ni se molestaba en visitar a un mortal cien añosdespués de hacer el trato, no si la visita no fuera de interés para sacar alguna clase de beneficio o de pacto cerrado con anterioridad.