Pruebas

1.1K 74 16
                                    

23 de mayo de 1964 Detroit-Estados Unidos.

La pequeña niña de cabellos rubios se encontraba en la sala de su casa jugando, sentada en su alfombra acompañada de sus viejos juguetes, un pequeño auto de un rojo ya despintado, la figura de un soldadito de plástico y una vieja muñeca de trapo, ya estaba en malas condiciones, aun así la pequeña la adoraba, era su única amiga y vivían grandes momentos juntas siendo superheroínas que combatían las injusticias en el mundo, pero claro... todo estaba en su imaginación era un escape temporal que tenía para no prestarle atención a su triste realidad.

Proveniente de una familia pobre viviendo en los suburbios más peligrosos de detroit, el lugar en el que vivían era un desastre, la pintura estaba ya desgastada y lucia manchas grandes de suciedad, las condiciones del lugar no eran aptas para una niña de 4 años, sus padres lo sabían y su preocupación de todos los días era como podrían seguir sobreviviendo y evitar que una desgracia les suceda.

El padre de la niña sonreía mientras miraba a su pequeña niña desde la cocina, la inocencia que tenía al jugar le hacía reír, pronto su expresión se desvaneció al escuchar a su esposa llamándolo, se giró para seguir escuchándola acerca de una propuesta que le habían hecho llegar.

- ¿qué dices, estás de acuerdo? - pregunto mientras sostenía unos papeles en las manos

-No, no estoy de acuerdo en que firmes un contrato para que le inyecten una mierda desconocida a nuestra hija- espeto molesto el hombre quien le arrebato los documentos de las manos de su esposa

- ¿y qué quieres que hagamos eh?, ya no nos queda suficiente dinero para comer, y tampoco para sobrevivir esta semana, este contrato nos asegurara una buena estabilidad económica.

-a cambio de que la traten como a una rata de laboratorio... ¿acaso de tas cuenta de lo que quieres hacer? - susurro para no llamar la atención de la niña.

-No es como tu piensas... ellos me dijeron que nuestra hija tendría buenos cuidados y la solución que probaran en ella ya está 100% verificado - comentó animada a su esposo quien tenía la mirada llena de furia.

-Dame una buena explicación del porque ese tratamiento sería bueno para la pequeña Liv... porque yo no la veo enferma - cruzo los brazos esperando una palabra de su esposa que le hiciera cambiar de opinión, estaba bastante seguro que ni ella sabía que era lo que le iban a hacer a su hija.

- ¿Sabes de los súper? - le pregunto a su marido.

-claro que los conozco... ¿pero que tienen que ver ellos con esta situación? - respondió confundido al escuchar su nombre.

-Nuestra hija puede estar al mismo nivel que ellos, piénsalo ellos ya son expertos y la sustancia que le inyectaran a Liv es bastante segura, eso se confirma con los otros héroes que crearon.

-Quieres decir que esa solución que usaran en ella puede darle habilidades sobrenaturales?

-exactamente, míralo de esta manera nuestra hija salvara a muchas personas, personas que la necesitan. Ella será el orgullo de esta familia, solo es una pequeña prueba.

- ¿y si no funciona?... apenas es una niña, siento que es bastante presión para ella, la estaríamos condenando desde muy pequeña a sufrir - intentó razonar con su esposa.

-Escúchame, te prometo que nada malo le ocurrirá a nuestra hija, solo será una sesión con ellos y después podremos irnos a una nueva casa, la pequeña Liv al fin tendrá la vida que se merece en otro lugar porque aquí ella jamás podrá ser feliz - insistió señalando el interior de su vieja casa

- ¿Solo una sesión?, me juras que solo será una sesión y que después podré volver a tener a mi pequeña conmigo - pregunto

- ¡Adam por favor!, es eso o esperar a que una banda de delincuentes ingrese a nuestro hogar y nos maten, Detroit no es un lugar seguro para ella, somos pobres, ya estamos condenados... yo no quiero que cualquier malnacido le haga algo a nuestra hija... pero es la única salida que tenemos, por favor piénsalo - susurro desesperada.

BROKEN - THE BOYS // SOLDIER BOYDonde viven las historias. Descúbrelo ahora