We feel in love in october

20. Apologies.

♡MaxGriff.

                      ☆☆☆☆☆

Quizá en toda su vida a cometido muchos errores, quizá la haya regado más de una vez, quizá hasta podía hacer algo malo sin saberlo, esta última lo cometió en los últimos tres meses, meses que se la paso trabajando hasta morir, meses donde no pegaba el ojo por intentar trabajar duramente, meses de investigación y más investigación hacia el trabajo de periodista, si, a descuidado muchas cosas, su tiempo con su hijo, el tiempo con sus amigos y más importante, su pareja.

En un día soleado el Corrió bajo los rayos que lo quemaban, sin sombrilla ni nada corrío lo más rápido que pudo hasta llegar a una florería y buscar entre las flores alguna bonita y que le recordará a su pareja, desde hace mucho no de ven del todo, ambos trabajos los mantenían ocupados y cuando se veían el otro ya estaba dormido o ni siquiera llegaba a su pequeño departamento, ante esa distancia de poco a poco llegó en línea y ni los mensajes contestaban o contestaban tarde, ante esto intento terminar rápidamente su trabajo y después de un arduo trabajo de miles y miles de horas por fin lo acabo.

—¡Gracias! —. Grito mientras salía corriendo de la tienda para ir corriendo a otra para empezar a comprar cosas y dejarlas en el mostrador viendo la cara impactada de la vendedora al ver tanto —. ¿Cuanto será?

Paso al rededor de diez minutos para que terminará de hacer todo y los metiera en una bolsa, al terminar de empacar todo simplemente volvió a correr rápido hasta su hogar, entró con cuidado y busco a su novio, al ver que no estaba empezó a crear su plan maestro, según el y sus últimas investigaciones sobre el horario de su pareja, este salía a las cuatro de la tarde y se dirige a su otro trabajo, por ende llegaría a las ocho-nueve de la noche, tendría tiempo de sobra para poder cocinar, arreglar y hace todo lo que su alocada mente le estaba planeando.

Y si, se la paso al rededor de cuatro horas y media de su vida cocinando para que al final se quemara el pastel principal, desesperado al ver que se quemo la gran mayoría decidió buscar otra alternativa de postre, se relajo al encontrar una buena persona para ayudar, obviamente no esperaba que Ash llegara con sus mejores amigos.

—Viejo, eso no va así, según esto la lechera irá después, primero es la galleta —. Puntualizó el rubio mientras veía la receta, tanto el como Max se encargarían de la cocina después de otro intento de cocina con Shoter y que todo se volviera un desastre —. Si no lo haces como dice y improvisas como Shoter todo irá mal.

—¡Entonces hazlo tu!

Y si, ya estaba bastante desesperado por acabar, faltaban alrededor de tres horas para que Griffin llegara y no habían avanzado más de lo que habían hecho durante las primeras horas, una pequeña decoración con las flores y los platos acomodados, la cocina era un asco y faltaba poco tiempo más pensando en que ponerse y como ponérselo, su actitud no era la mejor durante esos meses pero quería arreglarla con esa cena. Suspiro cansado y metió el postre al refrigerador esperando a que se cumplan sus horas para estar, la comida terminó siendo algo pequeño, una crema de champiñones acompañada de un corte de carne sazonada finamente en su cocina hecha un desastre, lo normal, ahora a esperar que no se quemara del todo.

—¿Si se pudo? —. Pregunto curioso el japonés mientras veía la carne en el platillo.

—Pruebenla y me dicen si le falta algo.

Así todos la probaron del mismo platillo y juran que hasta Shoter cocinaba mejor, los tres solamente lo miraron y se quedaron callados, después buscaron alternativas de como mejorar todo eso, simplemente la cocina no se les daba hasta que el peli-morado encontró una buena receta y que se veía fácil, o todo era fácil y ellos la regaban. Después de dos horas totalmente tranquilas por fin pudieron comer algo digno del hermano del rubio.

Después de ese infierno en la cocina, todos se fueron a sus respectivas casas y el se quedó terminando de preparar todo, Eiji y Shoter habían hecho un buen trabajo al decorar el comedor, los girasoles en medio de la mesa, platos bien acomodados en sus respectivos lugares, unas velas a los lados de las flores, preparo una canción especial para en cuanto Griffin entrará y la escuchara, esa canción que sonó cuando se declaró y pudieron estar juntos, trago saliva nervioso, en medio de la ducha se le vinieron miles de ideas, ¿y si ya no lo ama? ¿Y si su relación está cayendo? ¿Que hará? El departamento lo puso a nombre del contrario y no tendrá a donde ir, no sabe que hacer pero intenta no pensar en eso porque si lo piensa más el terror se apoderará de él y no podrá hacer las cosas bien, ¿que hará entonces?

Sacude la cabeza y de termina de arreglar, en cuanto sale de su habitación oye las llaves entrar a la puerta, su corazón late rápidamente y empieza a sudar, se dirige a su celular conectado a la bocina pequeña y pone la canción, solo espera que no esté enojado y lo eche de su casa, o peor aún, entre con otra persona, una linda chica un poco alta pero no tanto, cabello largo y amarillo como el sol y sonrisa de estrellas, quizá ella sea mejor que el de mil maneras, quizá el ya no lo ama y solo lo soporto o...

—¿Max...? —. Murmura su nombre mientras entra y ve todo el escenario —. ¿Q-que es esto?

—Bienvenido —. Y aunque intente no poner cara deprimida lo hace, no lo puede evitar, lo ama más que nada y no quiere que se separen —. Griffin, yo...

—Mierda, Max —. Deja sus cosas en el cielo y se dirige a él tomándolo del rostro —. ¿Por qué lloras?

Tiene razón, quizá si lo merezca, durante esos meses lo a apartado de el, no han tenido intimidad, no se han besado, no recuerdan los toques o abrazasos del otro, tampoco de cuanto se aman, quizá si puede irse con otra y el lo entenderá, ¿fue su culpa no?

—Griffin, perdóname por irme —. Y lo abraza mientras esconde su rostro en su cuello —. Te amo porfavor no me dejes.

—Max ¿que estas diciendo? No te voy a dejar —. Y esas palabras lo hacen pensar las cosas, ¿no lo hará? —. Te amo, entiendo que tienes trabajo y que tienes que quedarte a supervisar y dirigir, lo entiendo, no te culpes, todo está bien.

—¿No me dejaras por una bonita rubia de ojos azules como el mar?

—No, ni siquiera conozco alguien así aparte de mi hermanito —. Lo mira con ternura mientras acaricia sus cabellos y se siente amado otra vez —. Tonto solo te amo a ti.

Y cuando se separa y ve esos ojos que brillan más que el sol se da cuenta que no miente, no hay mentiras en sus hermosos ojos así que lo besa y el otro con ternura y amor corresponde, quizá si exagero al pensar en todo eso, quizá si se alejo por mucho tiempo pero volvió a su hogar, si quizá también la a regado muchas veces, pero no se arrepiente de estar con Griffin y casi quemar la cocina con tal de hacerle una comida digna de el. Disfrutan su cena entre risas y charlas bonitas en compañía del otro, hablan y hablan y cuando no hablan solo se dejan guiar por su respiración y amor.