Día 20: Disculpas

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Lord Potter estaba sentado en su trono con actitud aburrida y gesto fastidiado.

Frente a él, se arrodillaba un hombre. Su cabello lacio y negro cubría parte de su rostro y sus oscuros ojos suplicaban perdón. Lord Potter suspiró y recargó su mentón en una mano.

—Por favor, mi Lord —rogaba el hombre —por favor. Tenga piedad.

—¿Piedad? — se burló el Lord —¿Cómo la que tuviste al asesinar a la chica? —demandó, su expresión aburrida reemplazada por una furiosa —¿Por abandonar al niño?

El hombre bajó más la cabeza.

—P-Pero, mi Lord —rogó —¡ella y el niño no eran más que monstruos! —lloró, tocando el suelo con su frente —¡Tenían negocios con el diablo!

Lord Potter bufó.

—Mi esposo decidirá tu destino, Riddle —decidió, dejándose caer contra el respaldo de nuevo y haciendo una mueca de asco hacia el hombre —Reza porque él tenga la piedad que a mi me falta.

Tom Riddle chilló cuando sintió las manos de los guardias tomarlo por debajo de los hombros y arrastrarlo hacia la salida, directo a los calabozos. Lord Potter miró todo con expresión exasperada, hasta que sintió unas manos posarse sobre sus hombros.

—¿La piedad que a ti te falta? —preguntó Consorte Potter —Creí que tú eras el bueno, cariño.

Lord Potter sonrió y cerró los ojos, disfrutando de la atención de su mágico esposo.

—Si yo soy el bueno y lo quiero decapitar —murmuró con placer —no me imagino el infierno que le espera antes de morir.

Abrió los ojos y se encontró con una copia más joven del hombre que acababa de condenar. Tom Potter era lo que conocían como un brujo, y era la razón de que las tierras que Harry heredó, y su gente, vibraran con abundancia y riqueza. Cuando por fin Tom le contó su pasado, de su padre que quemó a su madre y lo abandonó en el bosque a su muerte, Harry no pudo evitar investigar. Por suerte, Tom y su padre eran como dos gotas de agua, por lo que no fue difícil dar con el hombre.

—¿Y a qué debo tan exquisito regalo? —preguntó Tom, acariciando la mejilla del Lord —Sabes que no hubiera hecho nada si no lo hubiera vuelto a ver nunca.

—Lo se —respondió Harry, tomando la mano del otro —Pero yo quería hacer algo. Así como mis cuidadores fueron castigados, tu padre debe enfrentar las consecuencias de sus acciones. De haberte aceptado y educado, si hubiera aprovechado tu magia, quizá mis tierras serían suyas, pertenecerías a él.

—Jamás —negó Tom —Nuestra conexión es más grande que una simple coincidencia, Harry. Te hubiera encontrado. Te hubiera hecho mío.

Harry sonrió.

—Entonces, ¿ya no estás molesto conmigo por haber husmeado en tu laboratorio?

Tom suspiró.

—Pudiste haberte lastimado. Hacer pociones es, en mi opinión, la rama más impredecible de la magia —besó la frente de su Lord, sobre la cicatriz que ganó debido al incidente —Un ingrediente de más, o un movimiento faltante, y la poción cambia completamente.

—¿Eso qué significa? —Harry hizo un puchero.

—No, Harry, ya no estoy molesto —aseguró Tom —tu inusual disculpa fue más que suficiente.



[[pd. ¡seguimos en #1 del flufftober! *baile de emoción*

y el del año pasado está en 2o, pero no entiendo por qué si tiene más leídas y más favs que el #1 TmT]]

Beneath the milky twilightWhere stories live. Discover now